Los Ángeles – Un juez de inmigración criticado por su trato hostil hacia los extranjeros que llegaban a su corte en California renunció a su cargo a través de una carta en la que se despacha contra el sistema judicial y la actual administración del Departamento de Justicia (DOJ).

El magistrado Nicholas Ford renunció la semana pasada a la corte de inmigración con sede en San Francisco por medio de una misiva en la que aseguró que tenía una frustración «profunda» con los administradores de la corte del DOJ, según el periódico San Francisco Chronicle.

El juez también advirtió que sus supervisores eran «una comunidad temerosa cuyo interés principal nunca ha sido el crecimiento de los que supervisan, sino su propio empleo continuo”, reveló el rotativo que tuvo acceso a la misiva.

Ford fue uno de los jueces nombrados bajo la administración de Donald Trump, y en noviembre del año pasado una coalición de 17 grupos de servicios legales y defensores de los inmigrantes en San Francisco presentó una queja contra Ford ante la Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración (EOIR) del DOJ.

La queja aseguraba que Ford tenía un trato racista, con prejuicio a los discapacitados y hostil a inmigrantes, abogados y testigos.

“El juez Ford se sintió empoderado para gritar y acusar a mi cliente durante la audiencia, mostrando poca consideración por el hecho de que ella era un ser humano en su sala de audiencias”, decía Omar de la Cruz, abogado de inmigración del Centro Legal de la Raza, en la queja.

Por su parte Lisa Knox, directora legal de California Collaborative for Immigrant Justice, advertía que «el sesgo demostrado (por el juez Ford) socava el debido proceso para los solicitantes de asilo y los inmigrantes de color».

El grupo estaba pidiendo a la administración del presidente Joe Biden garantizar el debido proceso para los inmigrantes, y evaluara el trabajo de los jueces “racistas”.

En mayo de 2019, Ford fue designado por el entonces fiscal general, William Barr, para servir como juez de inmigración en San Francisco, a pesar de que, según un comunicado de la coalición, carecía de experiencia previa en esta materia.

El grupo también resaltó que Ford tenía ya un historial controvertido como juez penal en Chicago, donde trabajó por 16 años, en los que una serie de fallos fueron revocados en apelación.