Roma – Las autoridades de la isla italiana Sicilia (sur) harán pruebas de coronavirus a los migrantes que lleguen a sus costas, una vez hayan pasado la cuarentena preventiva, y también a los viajeros que vuelos procedentes de Egipto, Botswana, Hong Kong, Israel, Turquía y Sudáfrica.
«La nueva ordenanza amplía la obligación de realizar pruebas de COVID en los puertos y aeropuertos sicilianos a los pasajeros que lleguen de la República de Sudáfrica, Botswana, Hong Kong, el Estado de Israel, la República Árabe de Egipto y la República de Turquía», se lee en la ordenanza, remitida a Efe.
«Actualmente, la medida ya se aplica a aquellos que proceden o han estado en los 14 días en Reino Unido, Alemania, Estados Unidos, Malta, Portugal, España, Francia, Grecia, Holanda», añade.
La ordenanza ha sido firmada por el presidente de la isla, Nello Musumeci, y estará en vigor desde mañana y hasta el 31 de diciembre.
En este tiempo, la mascarilla al aire libre será obligatoria para los mayores de 12 años para intentar contener los contagios ante la llegada de la Navidad.
Las medidas pretenden frenar la circulación del virus, ya que, aunque los casos de Covid se han mantenido estables en los últimos días, preocupan las aglomeraciones navideñas y el regreso a la isla de sicilianos que viven en otros puntos de Italia.
Sicilia tiene actualmente 308 pacientes ingresados, de los que 43 están en unidades de cuidados intensivos, y otros 12.194 no tienen síntomas o son leves. La isla acumula más de 7.000 fallecidos desde febrero del 2020 y 324.000 contagios totales.
Ciudades italianas como Milán, Padua o Bolonia también han impuesto hasta pasadas las navidades la mascarilla en mercadillos callejeros y en zonas del centro histórico, que en estas fechas suelen estar muy concurridas.
La Federación Italiana de Empresas Sanitarias y Hospitalarias alertó este miércoles de que las hospitalizaciones por coronavirus se están acelerando progresivamente y en la última semana han aumentado un 16 %.
La inminente entrada en vigor del certificado sanitario reforzado y la expansión de la variante ómicron, cuyos efectos aún se desconocen, han impulsado la vacunación en Italia, donde el 84,58 por ciento de la población dispone de la pauta completa y el 45,66 por ciento ha recibido ya la dosis adicional o de recuerdo.
«Los números de los últimos días son muy alentadores, hay un aumento significativo de las terceras y primeras dosis, lo que demuestra que las medidas que hemos establecido están dando un nuevo impulso a la campaña de vacunación», dijo hoy el ministro de Sanidad, Roberto Speranza.
El avance de ómicron ha coincidido con un fuerte aumento de las infecciones en Sudáfrica y ha llevado a los países de la Unión Europea a suspender los vuelos a siete países del sur de África.