EFE/Fernando Bizerra Jr./Archivo

Los Ángeles – El inmigrante mexicano Rubén Juárez, amparado por la Acción Diferida (DACA), demandó este martes en un tribunal de San Francisco a la compañía de finanzas SoFi por negarle acceso a una variedad de créditos de consumo, incluidos préstamos estudiantiles, préstamos personales o de vivienda.

La acción legal, que busca convertirse en una demanda colectiva, alega que la compañía SoFi está negando y limitando sistemáticamente el acceso a los amparados por el programa DACA a oportunidades de préstamos y refinanciamientos y que tales restricciones son ilegales bajo las leyes federales y de California.

De acuerdo con la demanda, Juárez se topó con estas restricciones en noviembre de 2016, junio de 2017, diciembre de 2018 y diciembre de 2019 cuando intentaba financiar nuevamente un préstamo privado de 38.000 dólares que usó para ayudar a pagar una maestría en negocios internacionales en la Universidad de Fordham, en Nueva York, el alma máter del presidente Donald Trump.

Desde 2016, el «soñador» de origen mexicano comenzó a recibir material promocional de SoFi que ofrece a los estudiantes refinanciamiento de préstamos y servicios relacionados.

SoFi ofreció bajas tasas de interés, entre 3 y 4 %, por lo que Juárez buscó traspasar su préstamo por el que pagaba una tasa de interés fijo del 8,6 %.

En noviembre de 2016, Juárez visitó el sitio web de SoFi para comenzar el proceso.

Después de proporcionar sus datos personales, tenía que indicar si era ciudadano estadounidense, residente permanente o poseedor de visa. Sin embargo, como el soñador no pertenecía a ninguna de estas categorías no pudo seguir con su solicitud.

Juárez continuó recibiendo ofertas de refinanciación de préstamos estudiantiles de SoFi y en varias ocasiones intentó solicitar los servicios financieros con la esperanza de que la compañía hubiera cambiado su política.

SoFi reemplazó su prohibición general de otorgar préstamos a beneficiarios de DACA en diciembre de 2019, permitiendo solicitarlos a aquellos «soñadores» apoyados de un fiador que fuera ciudadano estadounidense solvente o un residente permanente.

El «soñador», que ha trabajado como analista de varias compañías bancarias, no tiene acceso a un codeudor calificado. Por lo tanto, la compañía sigue excluyendo a Juárez a los préstamos a pesar de su excelente solvencia crediticia, alega la demanda.

La acción legal fue presentada en el Tribunal de Distrito para el norte de California, con sede en San Francisco, ciudad donde SoFi tiene sus oficinas centrales.

En un comunicado, la organización Abogados por los Derechos Civiles (LCR) y el bufete de abogados Outten & Golden LLP, que están representando a Juárez, alegan que estas políticas afectan a miembros vitales de la comunidad.

«Su exclusión socava la importante inversión de los contribuyentes y la comunidad en su futuro y priva al país y la economía de sus contribuciones y talento», recalcó Oren Nimni, abogado de LCR.

«Tal talento es más importante que nunca, ya que los receptores de DACA representan aproximadamente 200.000 trabajadores esenciales de primera línea para combatir la pandemia de coronavirus», añadió.

Juárez, de 31 años y está amparado con DACA desde 2012, llegó a Estados Unidos en 1999 y desde ese entonces ha residido en Nueva York.