Miami – Jóvenes inmigrantes pusieron este sábado toda la responsabilidad de dar una vía a la ciudadanía a los millones que como ellos viven en Estados Unidos sobre los hombros del presidente, Joe Biden, y los demócratas del Congreso, a los que dijeron que dejen ya las buenas palabras y pasen a la acción.

En una conferencia de prensa en la capital del país, jóvenes amparados por la Acción Diferida (DACA) mostraron su inquietud después de que un juez federal de Texas dictaminase el viernes que este programa es ilegal y ordenó al Gobierno no aceptar nuevas solicitudes.

En la conferencia de prensa, los «soñadores» destacaron que ya no es tiempo de «excusas» y que lo «único» que a día de hoy puede proteger de la deportación a los «soñadores», a los amparados por el Estatus de Protección Temporal (TPS), trabajadores agrícolas y demás empleados «esenciales» es una vía a la ciudadanía.

Uno de ellos fue María José Urbina, quien recordó que Biden dijo este sábado que tiene la «ferviente esperanza» de que el Congreso finalmente aprobará una legislación que «brinde seguridad» a los «soñadores» que, dijo, han vivido «demasiado tiempo con miedo».

Pero Urbina fue más allá y le dijo a Biden y al resto de los demócratas que es necesario que la «esperanza se convierta en acción» y animó a los «soñadores» a presionar para que todos los senadores demócratas voten a favor de la reconciliación.

Esta fórmula legislativa posibilitaría esquivar el bloqueo de los republicanos al permitir aprobar un proyecto de ley con mayoría simple de 50 votos, en vez de con los 60 que hacen falta normalmente.

Los demócratas podrían aprobar esa medida en solitario, pero, para lograrlo, necesitan unir al ala más moderada del partido y al flanco progresista, y que no quede ningún voto en el camino para aprobar un paquete de gasto de 3,5 billones de dólares en el que han incluido provisiones para abrir una vía a la ciudadanía a millones de inmigrantes.

Por eso, Greisa Martínez, del mayor grupo de soñadores del país, United We Dream, le dijo a los congresistas que tienen que decir sí a la ciudadanía este año, pues ya no aceptan «más compromisos» y se les acabó el tiempo: «Necesitamos soluciones ya mismo».

Ella y otros jóvenes inmigrantes que llegaron de manera irregular al país siendo niños les recordaron a los demócratas el apoyo que les dieron en las últimas elecciones, en las que se hicieron con el control de la Casa Blanca y las dos cámaras del Congreso, pero que eso puede cambiar en las legislativas de 2022.

Ese año, dijo, si no se aprobó alguna legislación que regularice de manera definitiva su estatus migratorio apoyarán a «otros líderes políticos» que sí les ayuden de manera efectiva y no se queden solo en mensajes de apoyo y «buenos deseos».

El juez texano Andrew Hanen dictaminó este viernes que el expresidente Barack Obama se extralimitó en sus funciones al crear DACA, que protege de la deportación a cientos de miles de indocumentados y les da un permiso de trabajo, y ordenó al Gobierno Biden que no acepte nuevas solicitudes de amparo, aunque sí permitió que se renueven las que ya están aprobadas.

La mexicana Diana Atenco González, protegida por DACA y llegada a EE.UU. cuando tenía dos años, recordó la sensación de «seguridad» al conocer en su día que le habían aprobado la solicitud de amparo migratorio.

Pero «DACA nunca fue suficiente», dijo Atenco, porque, explicó, este programa no protege a los millones de indocumentados que se calcula viven en el país y la decisión del juez texano demostró que sus vidas en EE.UU. están en «riesgo».