Tegucigalpa – A cinco días de haberse iniciado el año lectivo 2023, varias tomas de escuelas y colegios reflejan la crisis permanente en el sector Educación en Honduras que tiene el casi imposible reto de cumplir 200 días de clases.
– Las tomas de las instalaciones de escuelas y colegios colocan en “jaque” el cumplimiento de 200 días de clases.
El año lectivo inició parcialmente ya que decenas de escuelas y colegios aún se encuentran en la etapa de matrícula y han programado el inicio de clases para finales de mes.
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Lo anterior es un reflejo de la crisis en este sector donde un día los inconformes son los docentes, otro los padres de familia y cuando no es ninguno de ellos, los alumnos protestan.
Esta inconformidad sumerge en una permanente crisis al ya golpeado sistema educativo que tuvo que pagar un retroceso a causa de la pandemia por la COVID-19.
Protestas en inicio del año
La remoción de seis docentes, fue el motivo de protestas este lunes para Padres de familia, alumnos y maestros del centro educativo República de Honduras # 2 de la colonia Altos de El Paraíso en Comayagüela, ciudad gemela de Tegucigalpa y capital de Honduras.
La toma de este centro educativo imposibilitó a los alumnos recibir clases, lo que marca un inicio de año estropeado para los cientos de estudiantes de este centro educativo.
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Entre tanto, en Choluteca, los padres de familia y estudiantes se tomaron las instalaciones del Instituto Tecnológico de Administración de Empresas (INTAE).
Yerri Ochoa, presidente de los Padres de Familia, denunció que el director de la institución es interino y piden se nombre a alguien con acuerdo que pueda tomar las decisiones correspondientes.
En ambas instituciones las instalaciones fueron tomadas, pero en decenas los portones permanecen cerrados ya que se continúa con la matrícula y el inicio de clase se ha programado para el 28 de febrero.
Uso de gabacha, nueva polémica
No obstante, los problemas en el sector Educación no son tan superficiales como una toma de instalaciones, el uso de una gabacha ha abierto una nueva polémica entre padres de familia, autoridades y los propios comerciantes del país que alegan serán altamente perjudicados al no poder vender los tradicionales uniformes.
Cabe señalar que autoridades de Educación anunciaron que en los primeros meses de 2023 iniciará el pilotaje para el uso de la gabacha azul turquesa que usarán los niños en las escuelas en vez del tradicional uniforme.
Ver: Unos 300 centros educativos iniciarán pilotaje de gabacha azul, anuncia Educación
En ese orden, el viceministro de educación, Edwin Hernández anunció que este 2023 iniciarán con el pilotaje de la gabacha escolar a nivel nacional, en unos 300 centros educativos.
El costo de la gabacha aún no se ha definido ya que dependerá del tipo de tela que se utilice, pero se prevé tenga un costo entre 250 y 300 lempiras.
Tanto padres de familia como comerciantes han adversado al proyecto piloto que ya es una realidad en varios centros educativos de las zonas rurales del país.
Menores excluidos
Como si lo anterior fuera poco, el mayor reto que enfrenta el sistema educativo este 2023 es lograr incluir a los menores que han sido excluidos.
De acuerdo a un informe presentado por la Fundación para la Educación Ricardo Ernesto Maduro Andreu (FEREMA) en el 2022, más de 700 mil menores se encuentran excluidos del sistema.
La investigación, “Educación: Otro quinquenio de Promesas Incumplidas”, cifró en que más de 700 mil menores entre 5 y 17 años están actualmente fuera del sistema educativo, además 5 cada 10 niños que inician la primaria no logran ni siquiera ingresar a noveno año y los niveles de aprendizaje cada vez son menores en un país sumergido en el 73% de pobreza y donde la pandemia fue un detonante para visibilizar el escenario de vulnerabilidad.
La emergencia sanitaria, dio paso a la educación virtual, propuesta que desde instancias oficiales se desarrollaba en un contexto en el que ni el 40% de las familias tenían acceso a internet; menos del 20% disponía de computadora en casa, un 40% tampoco contaba con acceso a servicio de cable (otros medios análogos), además un 30% carecían de un aparato de televisión y un 13% no disponían ni siquiera de un dispositivo de radio.