Washington – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció hoy que su jefe de gabinete, el general John Kelly, dejará su cargo a finales de este año, después de meses de roces y tensiones con el mandatario.
«John Kelly se irá hacia finales de año», dijo Trump en declaraciones a los periodistas en la Casa Blanca.
Trump describió a Kelly como «un gran tipo» y subrayó que aprecia «mucho su servicio» durante el último año y medio al frente de la oficina presidencial de la Casa Blanca.
«Anunciaré quién reemplazará a John, probablemente de forma interina, en el próximo día o dos», agregó el presidente.
Los medios estadounidenses habían rumoreado en las últimas horas con la probable renuncia de Kelly, que según la cadena CNN ya ni siquiera se hablaba últimamente con Trump.
Kelly, un general retirado que fue el primer secretario de Seguridad Nacional de Trump, fue designado jefe de gabinete en julio de 2017, con la misión de imprimir disciplina a una Casa Blanca marcada por el caos y las luchas de poder.
El veterano militar reconoció tres meses después que su trabajo en la Casa Blanca era «el más difícil» que nunca había hecho, y pronto comenzaron a proliferar los rumores sobre su mala relación con Trump.
Al mandatario pareció molestarle particularmente que Kelly afirmara, en enero pasado, que el presidente no estaba «completamente informado» al hacer algunas promesas de campaña en 2016, en particular la de construir un muro en la frontera con México.
El nombre que suena más fuerza para reemplazar a Kelly es el de Nick Ayers, el jefe de gabinete del vicepresidente estadounidense, Mike Pence, con el que Trump ya ha mantenido conversaciones sobre el tema, según el diario The Washington Post.
La salida de Kelly podría poner en peligro el cargo de la secretaria de Seguridad Nacional de EEUU, Kirstjen Nielsen, quien se considera la gran protegida del general y que a menudo ha recibido críticas de Trump, quien no la considera lo suficientemente dura en materia de inmigración.