San Sebastián (España) – El barco español «Aita Mari» navega este sábado hacia el este de la isla italiana de Sicilia para protegerse del temporal que anuncian las previsiones meteorológicas en la zona, mientras espera un puerto para desembarcar a los 78 migrantes que rescató el jueves en el Mediterráneo central.

El «Aita Mari» es un antiguo atunero reconvertido en embarcación de rescate por la ONG española Salvamento Marítimo Humanitario (SMH).

El buque auxilió el jueves pasado a esas 78 personas de una patera que estaba en «peligro» en aguas «internacionales», según la ONG.

El presidente de la organización, Íñigo Mijangos, informó en un comunicado de que «por el momento» no ha obtenido permiso de ninguna autoridad gubernamental para llevar a cabo el desembarco en puerto seguro.

Las 78 personas, entre las que hay seis mujeres y nueve niños, se encuentran en «relativo buen estado», aunque están cansadas y algunas presentan cuadros clínicos que pueden derivar en situaciones médicas más complejas con el tiempo porque padecen «un estrés postraumático bastante importante», explicó Mijangos.

Una de las mujeres está embarazada y otra ha sido sometida a una cesárea recientemente y padece un «cuadro de depresión profundo», indicó.

En la misma situación, según SMH, se encuentran otro buque español humanitario, el «Open Arms», con 73 migrantes a bordo, y el «Ocean Viking», con 213, de las organizaciones humanitarias Médicos Sin Fronteras y SOS Mediterranée.