Túnez – La Organización Internacional de las Migraciones (IOM), agencia dependiente de Naciones Unidas, advirtió hoy de la presencia en el Mediterráneo de un bote en malas condiciones que lleva a bordo a 95 personas, todas ellas migrantes que huyeron de Libia en un busca de un puerto seguro en Europa.
«Alrededor de 95 migrantes siguen flotando en el Mediterráneo central en riesgo de ahogarse, después de intentar huir de Libia. Reiteramos que los Estados y los capitanes tienen la obligación moral y legal de responder a los casos de socorro en el mar», alertó la agencia a través de su cuenta oficial en las redes sociales.
La alerta coincide con otra lanzada dos días atrás por activistas italianos que aseguraban que un bote con las mismas características y un número de personas similar había lanzado una llamada de socorro en la zona de salvamento internacional de la isla de Malta.
En estos momentos, solo una barco fletado por organizaciones internacionales podría realizar el rescate si es autorizado, ya que el resto están en puerto sin permiso para navegar.
Las ONG han advertido en repetidas ocasiones que los rescates por parte de las patrulleras libias donadas por la Unión Europea y dirigidas por antiguos traficantes de personas no son una solución ya que Libia no es «un puerto seguro» y en la mayoría de los casos son recluidos en centros de detención donde son maltratados y desde donde tratan de nuevo de huir hacia el mar.
Libia es un estado fallido, víctima del caos y la guerra civil, desde que en 2011 la OTAN contribuyera a la victoria de los diferentes grupos rebeldes que se alzaron contra la tiranía de Muamar al Gadafi.
En la actualidad, la guerra fratricida posterior ha devenido en un enfrentamiento armado internacional, totalmente privatizado, sin Ejércitos, librado por milicias locales y mercenarios extranjeros, que apoyan tanto al llamado Gobierno de Acuerdo Nacional sostenido por la ONU en Trípoli (GNA) como al mariscal Jalifa Hafter, tutor del Ejecutivo no reconocido en el este y hombre fuerte del país.
