Tegucigalpa – La Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) acoge desde hoy hasta el sábado 20 de septiembre, el primer Festival Universitario de la Cultura y el Arte para la Identidad Nacional (FUCAIN).
El encuentro, que abre una ventaja a la cultura entre la comunidad universitaria pública y privada del país, se realiza en el marco del 177 aniversario de fundación de la Máxima de Casa de Estudios, el 19 de septiembre de 1847.
La actividad aglutinará a cerca de 900 estudiantes de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM), de la Universidad de Defensa de Honduras (UDH), de la Universidad Nacional de Policía de Honduras (UNPH) y de la Universidad Nacional de Agricultura (UNAG).
Asimismo, asistirán estudiantes de la Universidad Tecnológica Centroamericana (UNITEC), de la Universidad Católica de Honduras (UNICAH), de la Universidad José Cecilio del Valle y la anfitriona UNAH.
Durante el desarrollo del evento cultural, los universitarios harán gala de sus habilidades artísticas en música, teatro, danza, artes visuales y literatura; y para eso la Ciudad Universitaria ha dispuesto de un conjunto de escenarios.
Las actividades de desarrollan en el Palacio Universitario de los Deportes, el Anfiteatro y la Sala Francisco Salvador del Cursos de Idiomas y Servicios Educativos (CISE), el Teatro Padre Trino, la Plaza de Registro, los auditorios N1 y N2 del edificio C3, la Plaza Cuatro Culturas, el Puente aéreo frente al edificio 1847 y la peatonal conocida como paseo Hollywood.
Unas 60 participaciones artísticas diarias podrán ser disfrutadas por el estudiantado y el público en general; además, se desarrollarán talleres y capacitaciones para aquellos artistas y estudiantes interesados en formación extracurricular.
En el acto de apertura, el rector de la UNAH, Odir Fernández, definió este evento como “una iniciativa que nace del corazón de nuestra universidad y que también abraza a todas las instituciones de educación superior públicas y privadas”.
Para el rector del Alma Mater, los artistas son los embajadores de la cultura y el arte de Honduras, y que cada uno de ellos será una pieza de “ese gran rompecabezas que llamamos identidad nacional y hoy debemos valorar y proteger”.