Tegucigalpa – “Vengo aguantando hambre”, fueron las tres palabras que expresó el niño hondureño Anderson Hernández de ocho años a periodistas en la frontera de Estados Unidos tras una larga travesía para llegar a ese país.
– El gobierno hondureño consideró como desgarrador el testimonio del infante y aceptó que esas historias se repiten todos los días en la frontera sur.
– La falta de empleo y huir de la violencia continúa siendo la principal causa que empuja los flujos migratorios irregulares desde Honduras.
El menor en compañía de su padre emigró luego que pandilleros robaran en su vivienda y que la madre del menor muriera hace tres meses.
“Toditos los días que vengo caminando”, refirió el menor al consultare cuántos días no comió.
Seguidamente acotó que no dejó nada en Honduras y recordó que su madre murió hace tres meses.
De su parte, el padre del menor Reinaldo Hernández comentó que dejó Honduras tras la muerte de su esposa y una hija de seis meses.
Pero el detonante fue que pandilleros usurparon su casa y robaron sus pocas pertenencias, relató.
De su parte, la vicecanciller Nelly Jerez, notificó que tanto el menor como el padre del infante ya fueron procesados en McAllen, Texas bajo el Título 42.
En marzo de 2020, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés) emitieron una orden bajo el Título 42, por la pandemia de COVID-19, que prohíbe la entrada al país de personas sin autorización, ya sean personas migrantes o solicitantes de asilo.
Bajo el Título 42 las personas extranjeras que ingresen o traten de ingresar a Estados Unidos por vía terrestre, son devueltas inmediatamente al país por el cual ingresaron, o sea a México, y si eso no es posible, son devueltas a su país de origen. Estas medidas se aplican tanto en los puentes o cruces oficiales como en los cruces irregulares.
“Nosotros a partir de ahorita le estamos dando seguimiento tanto al niño como al padre para ver cuál va a ser la condición de ellos”, expresó la diplomática hondureña.
Consideró que el testimonio de este menor es desgarrador y señaló que este caso se repite día a día en la frontera sur de EE.UU.
“El testimonio es desgarrador y eso es día a día lo que nosotros vemos que pasa en la frontera sur”, aceptó la vicecanciller.
Reiteró que como gobierno darán seguimiento a este caso, uno de cientos en la frontera estadounidense.
Es oportuno mencionar que el número de migrantes hondureños indocumentados deportados en el primer semestre de 2021 aumentó un 18.7 % con respecto al mismo periodo de 2020, según estadísticas oficiales.
Entre enero y junio pasado fueron deportados 27 mil 870 hondureños desde EEUU, México, Europa y países centroamericanos, de acuerdo con las cifras del Observatorio Consular y Migratorio de Honduras.
Esta cifra es superior un 18.7 % a los 23 mil 474 hondureños deportados en el mismo periodo del año pasado, alcanzando los 36 mil 588 en todo 2020, la cifra más baja desde 2015.
La cifra anterior revela que los hondureños continúan emigrando pese a los nuevos desafíos a causa de la pandemia o al riesgo que la misma implica.
La falta de empleo y huir de la violencia continúan siendo las principales causas de los flujos migratorios desde Honduras.