Bruselas – La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, defendió este jueves el «equilibrio» entre la responsabilidad y la solidaridad en el futuro pacto migratorio y de asilo, frente a la preocupación expresada por la presidenta de la Comisión de Interior del Congreso español, Ana Botella.
El intercambio entre ambas se produjo en el marco de una conferencia interparlamentaria de alto nivel sobre migración y asilo organizada por la Eurocámara, en la que aparte de Von der Leyen y del presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, participaron miembros de los parlamentos nacionales.
Botella valoró la propuesta de pacto migratorio y de asilo, presentada el pasado septiembre, e indicó que en España hay «esperanzas» de que la UE llegue a una solución para una política común, aunque indicó que existen tres cuestiones que preocupan.
En primer lugar – dijo -, preocupa que se avance en «unas reglas muy estrictas y claras para la responsabilidad» (sobre los migrantes que acceden a la UE) pero «difusas o quizá inviables en la práctica para la solidaridad».
«Si la presión se concentra en cinco estados no funcionará cualquiera que sea la solidaridad», señaló Botella, y añadió que «el pacto quizá refuerza ese desequilibrio entre la responsabilidad y la solidaridad porque no es realista».
La presidenta de la Comisión Europea respondió a Botella que la propuesta de pacto si asegura un «equilibrio» entre responsabilidad y solidaridad.
«La solidaridad es obligatoria. No se puede elegir si ser o no solidarios, hay que serlo y demostrarlo, pero se puede elegir cómo ser solidario», indicó Von der Leyen.
Otras inquietudes planteadas por la representante del parlamento español fueron los procedimientos en las fronteras exteriores, donde consideró que hay «mucho margen de mejora», y que no se incluyan medidas concretas sobre la dimensión exterior, es decir, la colaboración con terceros países de origen o tránsito.
Von der Leyen consideró en ese contexto que la rapidez de los futuros procedimientos que se desarrollarán en las fronteras exteriores serán «clave» y que el mecanismo para un mejor control e identificación permitirá generar confianza «para un sistema rápido, eficaz y duradero».
Los participantes en la conferencia subrayaron la necesidad de superar las diferencias entre los estados miembros para avanzar hacia una gestión migratoria común, un asunto bloqueado desde hace más de cinco años.
Alemania, país que preside la Unión Europea este semestre, se había propuesto llegar a un acuerdo político sobre algunos de los elementos del futuro pacto de aquí a diciembre, pero las posiciones entre los países todavía están lejos en la mayoría de puntos, según se constató en la última videoconferencia de ministros de Interior la semana pasada.
En caso de que no se cierre el asunto de aquí a final de año la negociación pasará a la siguiente presidencia, que asumirá Portugal a partir del próximo 1 de enero.
Durante el evento hoy, el presidente de la Eurocámara, David Sassoli, consideró que para la UE es importante demostrar que es capaz de gestionar unida la política migratoria, recibiendo a los migrantes que necesitan protección y repatriando «con dignidad» a los que no pueden quedarse.
También enfatizó la necesidad de asegurar el rescate de los migrantes en el mar y de contar con un sistema de policía e inteligencia para desmantelar las organizaciones que trafican con los migrantes.
