La Habana – El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, dijo que Cuba debe evitar el aislamiento internacional y acercar a la cada vez mayor emigración cubana con una política migratoria que sume a pesar de las diferencias, publican este martes medios oficiales de la isla.
En medio de una «nueva estrategia capitalista colonial y neoliberal» liderada por Estados Unidos, el país caribeño debe «evitar el aislamiento, sin ceder en principios ni posiciones», pidió el mandatario en una reunión con diplomáticos cubanos reseñada este martes en el diario estatal Granma.
«En los momentos actuales donde se regresa a la época de la confrontación y surgen nuevos peligros que es necesario enfrentar, urge prepararnos cada vez más», insistió Díaz-Canel, que recordó cómo EE.UU ha «recrudecido» el embargo sobre Cuba, «sobre todo en el ámbito económico».
La Habana y Washington restablecieron relaciones diplomáticas en julio de 2015 tras más de medio siglo de enemistad e iniciaron un proceso de «normalización» estancado ahora tras la llegada a la Casa Blanca de Donald Trump, que ha dado un nuevo giro en la política hacia Cuba.
En medio de este «deshielo» la isla ha aprovechado para fortalecer alianzas en el exterior, entre ellas el histórico acuerdo bilateral firmado en 2016 con la Unión Europea, que pone fin a la restrictiva «posición común» que condicionaba las relaciones del bloque a los avances en derechos humanos en la isla.
El presidente cubano, que el próximo 19 de abril cumplirá un año en la jefatura del Estado, señaló «la necesidad de continuar trabajando con la emigración cubana en el exterior, no solo en Estados Unidos».
«No podemos desconocer a los muchos cubanos que viven en el exterior orgullosos y nostálgicos de su patria», subrayó Díaz-Canel, quien llamó a escribir una política migratoria inclusiva, porque «no tenemos que coincidir en todo, pero podemos sumarnos», indicó.
Además, llamó la atención sobre el «fuerte impacto que tienen los servicios consulares» que el Ministerio de Exteriores presta a los cubanos de dentro y fuera del país, a quienes se debe ofrecer un servicio que distinga por la «calidad, el buen trato y la profesionalidad», agregó.
Más de 2,4 millones de cubanos residen fuera de la isla, la gran mayoría (84 %) en Estados Unidos y Canadá, y el resto en Europa (10 %) y Latinoamérica (5 %), entre otras regiones, de acuerdo a las últimas cifras oficiales disponibles, publicadas en octubre de 2017.
Entre las quejas más frecuentes de la migración cubana está la lentitud y lo complicado de los trámites, la burocracia y el alto costo del pasaporte.
El documento, uno de los más caros del mundo, llega a costar el equivalente a 100 dólares a los residentes en la isla -donde el salario promedio mensual no llega a los 30 dólares-, una cifra que se cuadruplica si la solicitud se realiza desde el extranjero.
Una reforma migratoria aprobada en 2013 durante el mandato presidencial de Raúl Castro (2008-2018) incluyó la eliminación del permiso de salida para los ciudadanos de la isla y flexibilizó las condiciones de retorno de los emigrantes.
En la reunión del Minrex se informó también de que 551.908 cubanos viajaron al extranjero por motivos personales en 2018, un 20,13 % más que el año precedente.
Desde la entrada en vigor de la reforma, los residentes en la isla han realizado más de 3,4 millones viajes al exterior.