Miami – La Corte Suprema de Estados Unidos se puso este jueves del lado de un inmigrante al considerar que el Gobierno debe notificar el inicio del proceso de deportación en un único documento, en un caso que podría beneficiar a miles de indocumentados.
En una inusual votación de 6-3, el máximo tribunal falló en contra del Gobierno federal al considerar que una orden de deportación en la cual falta información no puede ser corregida con una notificación posterior.
Así, el tribunal decidió que las notificaciones enviadas por los tribunales de inmigración y conocidas como «aviso para comparecer» no pueden consistir de documentos múltiples, sino que han de contener toda la información requerida legalmente en un solo documento para activar la llamada «regla de tiempo de parada» (stop-time rule).
Esa regla marca una fecha a partir de la cual se cuenta el tiempo que un inmigrante ha pasado en Estados Unidos antes de recibir el aviso de comparecencia, lo cual puede determinar si el inmigrante califica para ciertas medidas que evitan o postergan la deportación.
Los inmigrantes que ya tienen orden de deportación y han acumulado 10 años de presencia física continuada en Estados Unidos pueden ser elegibles para que se cancele la expulsión.
Ese periodo de presencia continuada, sin embargo, se consideraba terminado cuando el individuo había recibido un aviso para comparecer, aunque estuviese incompleto y no incluyese la hora y el lugar de la audiencia.
Los jueces Neil Gorsuch, Sonia Sotomayor, Clarence Thomas, Stephen Breyer, Elena Kagan y Amy Coney Barrett votaron en favor del demandante, el guatemalteco Agusto Niz-Chávez, mientras que votaron en contra el presidente del tribunal, John G. Roberts, así como Brett Kavanaugh y Samuel Alito.
De esta forma, la Corte Suprema revocó la decisión de un tribunal inferior que había impedido al guatemalteco proseguir con su solicitud de cancelar el proceso de deportación por haber vivido en Estados Unidos, donde reside desde que entró ilegalmente en 2005 y donde tiene tres hijos estadounidenses.
La Administración del hoy expresidente Donald Trump (2017-2021) entregó a muchos inmigrantes avisos que no especificaban la fecha, hora y lugar de la audiencia para el inicio de sus trámites de deportación, para así «detener» el tiempo de residencia en el país.
Incluso, y según la Asociación Estadounidense de Abogados de Inmigración (AILA), el Departamento de Seguridad Nacional emitió durante el mandato de Trump avisos de comparecencia con horas y fechas falsas «en un intento por cumplir» con la regla del «stop-time».
Así que este fallo puede beneficiar a miles de indocumentados que no cumplían el requisito de residencia cuando se inició su proceso de deportación por medio de varios avisos.