Tegucigalpa – El cardenal hondureño Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga tildó hoy de “triste espectáculo” y de “sesiones de mentiras y de engaños” los intentos fallidos por parte del Poder Legislativo para elegir a 15 magistrados que conformarán la siguiente Corte Suprema de Justicia por un periodo de 7 años.
– Tras tres intentos el Congreso Nacional de Honduras no ha podido siquiera iniciar el camino de elección de los nuevos magistrados, la falta de consenso en las fuerzas políticas prima en las sesiones parlamentarias.
Durante la homilía dominical el arzobispo de Tegucigalpa manifestó “qué triste el espectáculo que estamos viviendo en algo que debería ser transparente como la elección de los nuevos magistrados de nuestro Poder Judicial, ¡qué diálogos de sordos! dónde no se quieren oír las opiniones de todos, si no se quiere hacer prevalecer el capricho de una persona o de pocas personas”.
A renglón seguido, reflexionó que ahí no puede estar Dios ya que él no está dónde hay manipulaciones.
“Por cierto, ahí no puedes estar Dios, ahí no está la verdad. Donde hay manipulaciones, dónde pasan sesiones y sesiones de mentiras y de engaños. Si nos guiase la verdad, la verdad nos hace libres nos dice el Evangelio, pero donde hay manipulaciones y dónde hay caminos torcidos ahí no puede estar la verdad y ahí no puede estar Dios”, caviló el religioso.
En ese contexto, pidió orar para que los legisladores se dejen guiar por la luz y no por la oscuridad y que se alejen de querer buscar intereses alejados de los verdaderos intereses del pueblo.
Cabe señalar, que el Congreso recibió de parte de la extinta Junta Nominadora una lista con 45 nombres de los cuales de elegir 15 para conformar el Poder Judicial, pero luego de tres intentos no ha tenido éxito.
“El camino de la mentira no lleva a la verdad, el camino de la manipulación no lleva a la justicia y no se puede construir la paz en la injusticia, en la mentira, en la ley de la selva; hoy toca verdaderamente cuestionarnos si este Evangelio es una luz para nuestro pueblo o se quieren seguir simplemente las mismas ideologías que sirven solamente a grupos de interés y no al bien común”, externó el cardenal hondureño sobre ese tema.
Exhortó a orar para que no se haga la voluntad de pocas personas que nunca serán felices porque nunca tendrán la paz en su conciencia.
En otro tema, el arzobispo señaló que en el país vecino de Nicaragua se “priva de la nacionalidad a todo el que piensa distinto de unos dictadores que quieren oprimir la libertad, la verdad y la justicia”.
El anterior comentario en referencia al encarcelamiento y a la condena de 26 años que pesa sobre el obispo Rolando Álvarez, opositor al gobierno de Daniel Ortega.
“La justicia no se puede vencer con la injusticia”, sentenció al tiempo que dijo que la historia dicta que no hay dictadores que hayan terminado bien.
Solicitó orar constantemente por la iglesia hermana perseguida en Nicaragua para que el Señor Jesús les brinde fortaleza y puedan seguir adelante.
A continuación Departamento 19 reproduce la lectura del día tomada del santo evangelio según san Mateo (5,17-37):
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«No creáis que he venido a abolir la Ley y los Profetas:
no he venido a abolir, sino a dar plenitud.
En verdad os digo que antes pasarán el cielo y la tierra que deje de cumplirse hasta la última letra o tilde de la ley.
El que se salte uno solo de los preceptos menos importantes y se lo enseñe así a los hombres será el menos importante en el reino de los cielos.
Pero quien los cumpla y enseñe será grande en el reino de los cielos.
Porque os digo que si vuestra justicia no es mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos.
Habéis oído que se dijo a los antiguos: “No matarás”, y el que mate será reo de juicio.
Pero yo os digo: todo el que se deja llevar de la cólera contra su hermano será procesado. Y si uno llama a su hermano “imbécil”, tendrá que comparecer ante el Sanedrín, y si lo llama “necio”, merece la condena de la “gehenna” del fuego.
Por tanto, si cuando vas a presentar tu ofrenda sobre el altar, te acuerdas allí mismo de que tu hermano tiene quejas contra ti, deja allí tu ofrenda ante el altar y vete primero a reconciliarte con tu hermano, y entonces vuelve a presentar tu ofrenda.
Con el que te pone pleito procura arreglarte enseguida, mientras vais todavía de camino, no sea que te entregue al juez y el juez al alguacil, y te metan en la cárcel. En verdad te digo que no saldrás de allí hasta que hayas pagado el último céntimo.
Habéis oído que se dijo: “No cometerás adulterio”.
Pero yo os digo: todo el que mira a una mujer deseándola, ya ha cometido adulterio con ella en su corazón.
Si tu ojo derecho te induce a pecar, sácatelo y tíralo. Más te vale perder un miembro que ser echado entero en la “gehenna”.
Si tu mano derecha te induce a pecar, córtatela y tírala, porque más te vale perder un miembro que ir a parar entero a la “gehenna”.
Se dijo: “El que repudie a su mujer, que le dé acta de repudio”. Pero yo os digo que si uno repudia a su mujer —no hablo de unión ilegítima— la induce a cometer adulterio, y el que se casa con la repudiada comete adulterio.
También habéis oído que se dijo a los antiguos: “No jurarás en falso” y “Cumplirás tus juramentos al Señor”.
Pero yo os digo que no juréis en absoluto: ni por el cielo, que es el trono de Dios; ni por la tierra, que es estrado de sus pies; ni por Jerusalén, que es la ciudad del Gran Rey. Ni jures por tu cabeza, pues no puedes volver blanco o negro un solo cabello. Que vuestro hablar sea sí, sí, no, no. Lo que pasa de ahí viene del Maligno». (RO)