Londres – El carnaval de Notting Hill, que cada año se lleva a cabo en el barrio londinense del mismo nombre, celebra hoy su jornada familiar con multitudes que festejan la historia caribeña al cumplirse el 75 aniversario de la llegada a este país de los primeros inmigrantes del Caribe en la posguerra.
La llamada “generación Windrush” dejó una fuerte impronta en el Reino Unido cuando, al término de la II Guerra Mundial, el Reino Unido, muy dañado por los bombardeos de los nazis, solicitó ayuda a sus colonias para reconstruir este país, a cambio de empleo y una nueva vida.
Desde 1966, la cultura caribeña se recuerda y festeja todos los veranos -excepto durante el parón al que obligó la pandemia de coronavirus de 2029 al 2021- en el famoso carnaval.
En esta ocasión, también el multitudinario evento en el oeste de la capital aglutinó desde primera hora numerosas bandas de música, bailes, puestos de comida callejeros y turistas y vecinos que se acercaron a la zona para disfrutar de las numerosas actividades.
La jornada de hoy se considera el “día familiar o día infantil” dentro de este evento de dos días -aunque algunas celebraciones comenzaron ya el sábado por la tarde-, con desfiles infantiles, mientras que mañana lunes, día festivo en el Reino Unido, es el día “grande”.
En un comunicado, el alcalde de Londres, Sadiq Khan, destacó que “el Carnaval de Notting Hill es uno de los festivales callejeros más grandes del mundo y forma parte del tejido de nuestra ciudad”.
El primer edil de la capital dijo que “la celebración de la historia y cultura caribeña, a cargo de la comunidad, aglutina todo lo que hace que Londres sea una de las mejores ciudades del mundo”.
“Al tiempo que continuamos trabajando para construir una ciudad más justa y próspera para todos, estoy encantado de que el festival esté de vuelta, más grande y mejor que nunca”, afirmó.
Este año, además, es «extra especial», según Khan, ya que se marca el 75 aniversario de la llegada del transatlántico HMT Empire Windrush, que trajo a la denominada generación Windrush, los caribeños que llegar al país tras la II Guerra Mundial para ayudar en su reconstrucción.
En declaraciones a EFE, uno de los congregados en el festival, un ciudadano jamaicano-canadiense,de nombre Matthew, señaló que para él «el carnaval significa la libertad de nuestra historia».
«Fuimos colonizados, esclavizados y ahora lo celebramos en Londres», apuntó.