Tegucigalpa – A pocas horas de recibir el embate del ciclón tropical Iota, Honduras se prepara este lunes para recibir las primeras ráfagas del fenómeno natural con marejadas ciclónicas, precipitaciones y fuertes vientos.

– El cardenal Óscar Andrés Rodríguez, clamó al Señor que ahorre a nuestra Honduras otro sufrimiento como el que acaba de pasar.

– Las universidades nacionales y privadas anunciaron que se suspenden las actividades académicas durante esta semana.

– Iota se convirtió la tarde del domingo en huracán categoría dos y se espera que impacte en Nicaragua el martes como categoría tres o cuatro e incluso cinco.

La última actualización del Centro Nacional de Huracanes, indica que Iota se fortaleció la tarde del domingo y ya era un poderoso huracán categoría dos y “se espera que traiga vientos potencialmente catastróficos, marejadas ciclónicas potencialmente mortales e impactos de lluvia extrema en América Central”.

Ciclón sumamente peligroso

El fenómeno natural se encuentra ubicado a unos 420 kilómetros al este-sureste del cabo de Gracias a Dios, informó el jefe de Meteorología de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), Francisco Argeñal.

Agregó que la velocidad del huracán es de 15 kilómetros por hora (km/h), y mantiene vientos sostenidos de 120 Km/h en su interior y se desplaza hacia el oeste.

Apuntó que desde la tarde del domingo se comenzaron a presentar lluvias cerca de la desembocadura del río Coco en la frontera entre Honduras y Nicaragua, asimismo, en las zonas montañosas entre los departamentos de Olancho y Colón y otras precipitaciones estaban afectando algunas zonas de los departamentos de Choluteca y Valle, así como el sur de La Paz, que son brisas del mar a tierra debido a las temperaturas altas.

Intensas precipitaciones

Asimismo, detalló que desde la noche del lunes comenzará a llover en Colón, norte de Olancho y en algunos sectores de Yoro y Atlántida con mayor intensidad y ya para el martes las precipitaciones serán intensas en esos sectores, que harán que los ríos Patuca y el Aguán eleven su nivel e incluso puedan causar daño en los municipios que están cerca de sus riberas en lugares como Sabá, Sonaguera y Tocoa, principalmente en las partes bajas de esas ciudades.

Añadió que, aunque en menor cuantía, los departamentos de El Paraíso y Francisco Morazán experimentarán lluvias intensas, así como en el norte de Comayagua donde se esperan importantes acumulados.

Indicó que el oleaje en el Golfo de Fonseca se mantendrá normal por lo menos hasta el miércoles, ya que el fenómeno se estará debilitando e incluso disipando cerca de la frontera con El Salvador.

Donde sí estará alto el oleaje a partir de la tarde noche del lunes es desde Punta Patuca hasta el cabo de Gracias a Dios y desde Punta Patuca hasta Punta Castilla, por lo cual se ha emitido una advertencia de huracán.

Precisó que las precipitaciones tendrán acumulados de entre 300 y 400 milímetros en algunas zonas entre Olancho y Yoro y entre Olancho y Colón y acumulados de entre 200 y 300 en el norte de Comayagua y en algunos sectores de Santa Bárbara y de Yoro por lo que la gente que vive en el Valle de Sula debe prestar atención a la crecida que pueden experimentar los ríos Ulúa y el Chamelecón, especialmente a partir del miércoles.

El Cenaos detalló que la región central, que incluye a Tegucigalpa y sus alrededores, van a tener acumulados de entre 60 y 80 milímetros con máximo en zonas altas de 100 a 150 milímetros, pero las condiciones se muestran que los municipios del sur del país que es donde se espera que empiece desmarcarse el centro de la tormenta, generará mucha lluvia en la capital del país.

Alerta roja vigente e indefinida

En ese sentido, el Comité de Alertas de Copeco, determinó mantener vigente la alerta roja por tiempo indefinido, a partir de las 12:00 del mediodía de este domingo 15 de noviembre.

De acuerdo con el Cenaos, Iota ingresará al territorio nicaragüense el lunes por la noche y se moverá al norte de ese país, para luego ingresar a Honduras, el martes por la noche por el sur de El Paraíso.

En su trayectoria las bandas nubosas generarán grandes cantidades de lluvias que ocasionarían inundaciones repentinas en todo el país, además ante los niveles de saturación del suelo dejados por la tormenta Eta, se incrementará el riesgo de deslizamientos, advirtió la Copeco.

Desde el domingo comenzaron las lluvias en La Mosquitia y este lunes por la mañana habrá un aumento en el oleaje de ocho a nueve pies y de 10 a 12 pies a partir de la tarde de ese mismo día desde el cabo de Gracias a Dios hasta Punta Castilla, las condiciones de vientos serán superiores a 120 Kilómetros por hora cerca de esas áreas a partir del martes.

Hay advertencia de tormenta tropical desde Punta Patuca hasta Punta Castilla y vigilancia de huracán Nicaragua/Honduras al borde de Punta Patuca a través del Centro Nacional de Huracanes.

Evacuaciones masivas

Ante ese escenario Copeco, a través de su Sistema de Alerta Temprana (SAT), llamó a las autoridades municipales y de seguridad a realizar a partir del domingo evacuaciones obligatorias, en aquellos sitios de peligro cercanos a ríos, vados y quebradas, así como en áreas con antecedentes de derrumbes.

Se apeló a la población a hacer caso a las recomendaciones de las autoridades, de igual forma se les pide realizar auto evacuaciones, para ello pueden acudir a albergues solidarios con familiares y amigos, o a los habilitados por sus alcaldías municipales.

De carácter urgente e inmediato las evacuaciones obligatorias se deben realizar en las zonas de peligro de los siguientes departamentos de Gracias a Dios, Atlántida, Cortés, Colón, Yoro, Francisco Morazán, Olancho, El Paraíso, Choluteca y Valle, las zonas que serán impactadas por Eta.

El jefe de los Comandos de Incidencia de Copeco, Marvin Aparicio, indicó que entre la noche del sábado y la tarde del domingo ya se había evacuado a alrededor de 60 mil personas, principalmente en el departamento de Gracias a Dios, donde unas 20 mil personas se han desplazado, al igual que en el municipio de La Lima, no obstante, las evacuaciones continúan, ya que el ingreso de Iota es inminente, va a pasar, va a dejar afectaciones, va a golpear fuertemente.

Por su lado, el jefe del Comité de Emergencia Municipal (Codem) del Distrito Central, Mario Reyes, indicó que este domingo en la capital se realizó una actividad de pregón en conjunto con la Policía Militar y la Policía Municipal en los distintos barrios, colonias, aldeas y caseríos que están en zonas de riesgo.

Se sobrevoló la capital en el helicóptero de la Policía Nacional y hasta el domingo a las 12:00 de la noche prevalecía una alerta verde, en la cual se han realizado todas las acciones de preparación incluyendo la permisibilidad para que la población pueda abastecerse de medicamentos, víveres, agua embotellada y acudir a citas médicas ya que a partir del martes estará restringida la circulación al entrar en vigencia la alerta roja.

Mientras tanto, se siguen limpiando cunetas, tragantes, desagües y dragados y ahorita hay mil 608 personas alojadas en 38 albergues en la ciudad que es gente que ha sido evacuada porque están en zonas de derrumbe para la gestión de desastres y ahora se está determinando a dónde se llevará a los pobladores en zonas de inundación que prácticamente será en dos macro albergues, uno en la Villa Olímpica en Tegucigalpa y en el Instituto Central Vicente Cáceres en Comayagüela.

Ojo con las bandas nubosas

El jefe de Alerta Temprana de Copeco, Juan José Reyes, indicó a Proceso Digital que la información que genera el Centro Nacional de Huracanes, la recibe el Cenaos, la analiza y proporciona argumentos sólidos para tomar acciones de prevención.

Por eso en esa primera línea, se pide a la población en sectores aledaños a la margen izquierda del río Aguán, al río Patuca, al río Leán, al río Cangrejal y al río Cuero, que deben hacer evacuaciones oportunamente y no esperar cuando ya estén las condiciones meteorológicas estén afectando esos sectores, subrayó Reyes.

“Esperamos que puedan cambiar esas proyecciones, pero técnicamente tenemos que decir que hasta allá nos lleva la proyección de ese fenómeno, sin embargo, a medida que vaya acercándose a tierra va a ir perdiendo categoría, pero sigue siendo igualmente peligroso”, recalcó.

Explicó que el centro o el ojo del fenómeno es un punto georreferencial y lo que debe preocupar son las bandas nubosas que se extienden varios kilómetros y son las que trasladan humedad del mar hacia tierra firme y eso es lo que se tiene que monitorear para tomar las medidas preventivas.

Puntualizó que “la alerta roja tiene un significado vertical, no es negociable, la alerta roja es evacuación y está aplicada a partir del viernes a las 12:00 del mediodía por tiempo indefinido por lo tanto los Comités de Emergencia Local y Municipal conocen bien las áreas de vulnerabilidad deben estar trabajando en las evacuaciones principalmente en aquellas áreas de extrema vulnerabilidad”.

El decano de la facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Nabil Kawas, indicó que las probabilidades de Iota siguen siendo las mismas que las de Eta, la trayectoria es muy parecida y cualquier cambio en la trayectoria igualmente va a afectar a todo el país.

En ese sentido, recomendó hacer caso a las recomendaciones de los Comités de Emergencia Local y Municipal, y atender la orden de evacuación.

En su homilía dominical, el cardenal Óscar Andrés Rodríguez, pidió al Señor que esa solidaridad demostrada por los hondureños con los damnificados de la tormenta tropical Eta, no tenga que multiplicarse por el paso de Iota, y “con mucha fe, sabiendo que Dios puede hacer posible lo aparentemente imposible, pidamos al Señor que ahorre a nuestra Honduras otro sufrimiento como el que acaba de pasar, con mucha fe”.