Miami – La congresista demócrata Norma Torres y activistas proinmigrantes reclamaron este miércoles al presidente Joe Biden que otorgue el Estatus de Protección Temporal (TPS) a Guatemala, un país, que, en su opinión, ha sufrido «un incidente horroroso detrás de otro».
«El TPS es una herramienta temporaria que el Gobierno puede usar para dar algún alivio a gente que ya sufrió demasiado», dijo en una teleconferencia la representante por California.
Decenas de miles de personas viven en EE.UU. amparadas por el TPS, programa que da permiso temporal de trabajo a los ciudadanos de una docena de países en los cuales el Gobierno de EE.UU. determina que han ocurrido desastres naturales o existen condiciones de violencia.
Torres, que es descendiente de guatemaltecos, destacó que el país centroamericano sufrió los efectos devastadores de los huracanes Eta y Lota el año pasado, además de erupciones de volcanes, inundaciones de los campos cultivados, lo que provocó la destrucción de las cosechas, y «gravísimos problemas de infraestructura».
«Es un incidente horroroso seguido por otro», dijo Torres, quien mencionó que además de los dos millones de personas impactadas por la destrucción de los huracanes, el país ha sufrido la pérdida de miles de vidas provocadas por la pandemia de la covid-19 y la «incapacidad del Gobierno de vacunar» a la gente.
En este sentido, la Casa Blanca envió la pasada semana 1,5 millones de dosis de la vacuna de Moderna contra la covid-19 donadas por Estados Unidos para contener la pandemia en el país.
«La recuperación de situaciones como éstas no se mide en días, semanas o meses. Se mide en varios años», expresó la legisladora, y es por eso que reclama el TPS como ayuda inmediata.
El economista Ricardo Barrientos, del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales, intervino en la teleconferencia desde Guatemala y dijo que las condiciones en su país ya eran muy graves antes de los huracanes y la pandemia, «y empeoraron» desde entonces.
Además de la corrupción, que dificulta el accionar del gobierno, existían serios problemas estructurales en los servicios de salud, con más de un 50 % de desnutrición crónica entre los niños y la alta mortalidad al nacer, indicó.
En el sistema educativo, destacó, solamente 1 de 4 niños tienen oportunidad de ir a la escuela y en estos momentos hay 900.000 fuera del sistema.
«No hay ninguna duda de por qué prefieren irse del país en busca de oportunidades», dijo sobre un fenómeno que ha llevado a que 154.000 inmigrantes guatemaltecos fueran detenidos en la frontera de EE.UU. con México desde que comenzó el año fiscal, en octubre de 2020.
Oscar Chacón, director ejecutivo de Alianza Américas, dijo que la designación de TPS para Guatemala no solo brindaría protección contra la deportación para aquellos que han huido de circunstancias peligrosas, sino que también generaría un mayor flujo de remesas hacia el país desde los Estados Unidos.
«La Administración de Biden debería actuar rápidamente para utilizar TPS para salvar vidas, pero también como una herramienta para ayudar a estabilizar financieramente el país», agregó.
El TPS permite trabajar legalmente en EE.UU. en tanto el Gobierno de este país determine que no existen condiciones seguras para el retorno a sus países de origen, varios de ellos de Centroamérica como El Salvador, Honduras y Nicaragua, a los que hay que sumar Venezuela, entre otros.