Tegucigalpa – Los más de 545 mil migrantes que transitaron por Honduras en el 2023 debieron afrontar una serie de obstáculos y los más de 195 mil que este año han cruzado por el territorio hondureño continúan con el reto de sortear estos mismos muros.

Aunque no se trata de un muro físico como el que divide a Estados Unidos de México, igual son retos y pruebas que al final se convierten en obstáculos en la travesía de los migrantes en tránsito.

Dichos muros tienen nombre y apellido: dengue, usura y cambio climático, entre otros. Estos son los obstáculos adicionales que los migrantes en tránsito deben sortear a su paso por el país centroamericano.

Las estadísticas en estos casos son casi nulas ya que por su estatus migratorio los migrantes no denuncian y no busca la ayuda médica o de otra índole que requieran, sin embargo, son problemas latentes que afectan a los propios ciudadanos, por ende se colige que también a quienes se encuentran en tránsito por el territorio nacional.

Dengue

Honduras acumula 13 mil 159 casos de dengue y 10 fallecimientos confirmados a causa de la enfermedad en el presente año, informó el viernes el portavoz de la Secretaría de Salud, Miguel Martínez.

El portavoz detalló que del 1 de enero a la fecha se confirman 13 mil 159 casos positivos de dengue a nivel nacional. En la semana epidemiológica 17 se confirmaron mil 762 casos a nivel nacional.

Indicó que son 10 las regiones sanitarias que registran casos mayores o iguales a 50.

Mientras que la Región Metropolitana de Distrito Central acumuló en la última semana epidemiológica 444 casos, seguida de la Metropolitana de San Pedro Sula.

Reiteró que en el presente año suman 10 defunciones por causa de la enfermedad.

Si bien, esta epidemia afecta a los hondureños no se puede desconocer que los migrantes en tránsito también están propuestos a ser infectados con el virus que transmite el zancudo Aedes aegypti.

Usura

El Subcomité de Asuntos del Hemisferio Occidental del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, presentó a finales del 2023 el informé titulado “Relaciones Bilaterales EEUU-Honduras: analizando el gobierno socialista de Xiomara Castro” en el que se mencionó estafas y usuras a migrantes en tránsito por Honduras por parte de funcionarios.

En ese orden, se mencionó al comisionado presidente del Instituto Hondureño del Transporte (IHTT), Rafael Barahona, de hacer cobros indebidos o excesivos a migrantes de distintas nacionalidades que hacen su travesía por Honduras.

El funcionario salió al paso en aquel entonces y pormenorizó el informe y señaló que carece de toda credibilidad.

Por las múltiples denuncias no oficiales de usura, el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) exhortó al Ministerio Público a investigar a las autoridades hondureñas que autorizan tarifas diferenciadas, en el transporte público, para aplicárselas a los migrantes que transitan territorio hondureño, en un claro acto de discriminación contra este sector vulnerable.

Los migrantes en tránsito no solo han denunciado cobros indebidos por parte de las autoridades, sino también de comerciantes y dueños de hoteles y hospedajes que les cobran una tarifa mayor a la regular por un producto o servicio.

Cambio climático

En un encuentro preparado por la ONG española Manos Unidas con motivo de la presentación de su campaña anual, titulada ‘El efecto ser humano’, el abogado ambientalista hondureño Donald Hernández alertó  de “la pobreza y el desplazamiento forzoso” a los que “miles de familias” se ven abocadas como consecuencia del cambio climático y “las políticas que ofrecen los bienes comunes” de su país “al mejor postor”.

Hernández asegura que esta degradación del entorno rural -de donde procede la mayoría de los que denomina “refugiados climáticos”- comenzó hace veinte años con la llegada de la industria agroalimentaria a los valles, las tierras más fértiles del país.

Sin embargo, este no es un problema exclusivo de Honduras, sino toda la región latinoamericana, de donde proviene el mayor flujo de migrantes en tránsito por Honduras, país de donde también se originan los flujos migratorios.

Aunque todavía predomina la migración motivada por aspectos económicos, el desplazamiento por efectos del cambio climático ha venido en crecimiento en los últimos años, no obstante, es otra arista de la migración que carece de cifras oficiales.

Hondureños también resienten el cambio climático  

“Esta parte del camino (Guatemala) es la más difícil para llegar a Estados Unidos, porque hay mucha policía y pueden regresarnos a Honduras”, explicó a la agencia EFE Mario Alvarado, un migrante hondureño que decidió buscar el “sueño americano”.

Con temperaturas de 40 grados, Alvarado atravesó la frontera, bordeando el río Motagua y las plantaciones de palma africana, para evitar ser detenido por las autoridades guatemaltecas.

Alvarado es la tercera vez que se encamina a Estados Unidos. Lo hace con su compatriota Danny Gámez, el mismo con el que hace unos meses fueron deportados desde Texas, Estados Unidos, después de una travesía que les permitió trabajar en la nación norteamericana como pintores.

Así como Alvarado y Gámez, miles de migrantes intentan cruzar Guatemala cada año y solo en lo que va de 2024 han sido detenidos casi ocho mil  por las fuerzas de seguridad para su posterior deportación, según cifras del Instituto Guatemalteco de Migración (IGM).

“No importa cuántas veces nos deporten. Si en Honduras no hay condiciones para vivir, siempre vamos a encontrar la forma de volver a irnos”, reiteró Alvarado, antes de alejarse entre el sendero de una plantación junto a su compañero de travesía. (RO)