Washington – El Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) recurrió al «abuso físico directo» contra ocho inmigrantes indocumentados oriundos de Camerún para forzarlos a que firmaran sus documentos de deportación, según una denuncia presentada este jueves por varios grupos de derechos humanos.

Los grupos, que incluyen a la Alianza Puente Haitiana, Familias por Libertad, y los Abogados en Louisiana de Inmigrantes Detenidos, denunciaron los supuestos abusos ante la Oficina de Libertades y Derechos Civiles del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).

Los ocho hombres se hallaban detenidos en el Centro Correccional del Condado Adams, un sitio de detención operado por una firma privada en Natchez, Mississippi, cuando fueron sometidos a coerción entre el 27 y el 28 de septiembre, según la denuncia.

Uno de los camerunenses, que ha pedido asilo y fue identificado solo con las iniciales D.F., sostuvo en la denuncia que un agente del ICE trató de hacerlo firmar un documento de deportación.

«Yo dije que no quería firmar una orden de deportación. Dije que tengo miedo de volver a mi país. Él me advirtió que iba a torturarme. Al día siguiente él volvió, trató de forzarme a que firmara y yo me negué. Me apretó el cuello contra el piso y yo le rogué ‘Por favor, no puedo respirar’. Perdí la circulación sanguínea. Me llevaron adentro con las manos sujetas a la espalda, donde no había cámaras», expuso.

Sofia Casini, directora de Estrategias de Visita en Libertad para Inmigrantes, sostuvo que «estos son relatos de primera mano de tortura a manos del ICE -los agentes de nuestro Gobierno- y de los guardias que trabajan para compañías carcelarias privadas».

«Dado que nadie usa gafetes con nombres cuando están torturando es imposible saber si es la misma persona que ese mismo día le facturó los dedos a alguien. El ICE permite que esto ocurra con plena impunidad. Cuando tengamos nuestros juicios de Nuremberg tendrán que responder por lo que sabemos que está ocurriendo», acotó.