Quito.– Simón Gangotena, violista y gestor cultural quiteño, fue seleccionado, de entre 44 postulantes, como el nuevo director musical del Teatro Nacional Sucre, de la capital ecuatoriana, informó el Municipio de Quito.

La formación musical de Gangotena inició en el Conservatorio Franz Liszt, en Quito, entre 1998 y 2005.

Luego obtuvo su título de «Bachelor in Music Performance», en la Chicago College of Performing Arts, en 2011, y en 2015 realizó el Masters of Music Performance, en la Universidad de Melbourne, en Australia.

Se ha presentado en salas de Suramérica, Norteamérica, Europa, Asía y Australia.

Gangotena ha colaborado con orquestas y grupos de cámara como CCPA String Quartet (EE.UU., 2009), Orquesta de las Américas (giras 2009 y 2010), Orquesta Sinfónica Nacional del Ecuador (2012, 2016), Melbourne Metropolitan Sinfonietta (Australia, 2014), y Elgin String Quartet (Australia, 2015).

Además, Anima Eterna (Italia, 2015), y Zeehelden Quartet (Holanda, 2019), y ha sido regularmente invitado a tocar con la Australian Brandenburg Orchestra (Australia, 2015), Cordia Ensemble (Italia, 2015), entre otros.

También se desempeñó como Instrumentista Principal (viola) en la Orquesta Sinfónica de Loja (Ecuador).

Su labor musical y como gestor cultural ha estado vinculada a los espacios inusuales, tanto como exdirector de la Fundación InConcerto, que realiza el Festival de Música Clásica en espacios no convencionales, como en otras instituciones académicas y artísticas.

«Creo que la música tiene la capacidad de conectar humanamente a las personas, que puede limpiar, en el momento en que la presentas horizontalmente: te estoy compartiendo algo y se genera una conexión muy especial», dijo.

Añadió que «se limpian estereotipos, e imaginarios en torno a la idea de la música clásica como algo elitista, como algo aburrido; el momento en que deconstruyes los espacios, el instante en que llegas a la plaza, la gente pasa y, de repente, escucha un instrumento tocando Bach, por ejemplo, se genera esta conexión en la que se rompen los estereotipos que nos enmarcan como individuos».

MIRADA CULTURAL PARA QUITO

«Quito es una complejidad poblada de contradicciones enormes. Hay muchas diferencias desde lo sociopolítico y socioeconómico. Pero al mismo tiempo es un espacio de encuentro de las diversidades, los pensamientos, las manifestaciones culturales, las formas de apreciar y de usar los espacios», dijo.

Consideró que Quito es esta ciudad «compleja donde podemos descubrir la riqueza de lo múltiple, lo diverso».

«Es necesario acceder a todo tipo de manifestaciones para enriquecernos. Escuchar no solamente un pasillo o reguetón o música clásica, hay que borrar esas fronteras construidas desde lo social», añadió.

Para Gangotena, esa es la labor del arte: «Enriquecernos, suprimir esas fronteras. Un espacio soñado sería ese en el que podamos tener un día un concierto de música clásica en la plaza, y al día siguiente presentar un concierto de reguetón o de cualquier otro género». EFE