Miami – Estados Unidos superó las 350.000 muertes por coronavirus en un momento en el que varios estados baten récords de casos y aumenta la presión hospitalaria, según refleja este domingo el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins.
El país más afectado por la pandemia del coronavirus sobrepasa esta cifra cuando se espera que el número de casos, que actualmente está en cerca de 20,5 millones de positivos, vuelva a repuntar en los próximos días debido a la celebración de las fiestas decembrinas.
Las cifras de la prestigiosa universidad son algo superiores a las oficiales, facilitadas por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés), que informa de 20 millones y 346.925 fallecidos.
A pesar de eso, el presidente Donald Trump acusó a la agencia gubernamental de usar un «método ridículo» para determinar la causa de las muertes, en su opinión mucho más laxo que países que «informan, deliberadamente, de manera muy inexacta y baja» el número de casos y muertes.
«En caso de duda, llámelo Covid. ¡Noticias falsas!», opinó el mandatario sobre el método utilizado por los CDC.
Sin embargo, el director general de salud pública del Gobierno estadounidense, Jerome Adams, contradijo poco después a Trump y dijo en declaraciones a CNN que no tiene «razones para dudar» de los números que ofrecen los CDC.
Según la Johns Hopkins, EE.UU. es el país con mayor número de casos y muertes a nivel mundial, muy por delante de Brasil, con 195.725, India (149.435), México (126.851) e Italia (74.985)
Estados Unidos, con el 4,2 % de la población mundial, concentra así cerca del 19 % de las 1.837.762 de muertes que ha causado el coronavirus desde el inicio de la pandemia.
La esperanza está puesta en la vacuna, de la que, según los CDC y con datos hasta el 2 de enero, se han puesto 4,2 millones de primeras dosis, sobre un total de 13 millones que se han distribuido a los estados.
Esta diferencia ha sido también motivo de críticas por parte de Trump este domingo.
«¡Las vacunas están siendo entregadas a los estados por el Gobierno federal mucho más rápido de lo que pueden administrarse!», dijo el presidente.
El propio Trump había prometido que antes de fin de año se administrarían 20 millones de primeras dosis, cifra muy lejana de las administradas, pero también de las entregadas por el Gobierno.