Tegucigalpa – Miles de hondureños del denominado «Corredor seco», en una región empobrecida, tendrán acceso a tecnología y asistencia productiva a través de un crédito aprobado por el Gobierno de España a Honduras por unos 35 millones de dólares, informó este viernes una fuente oficial en Tegucigalpa.
El crédito «se enmarca en la respuesta española a la crisis causada por el coronavirus en Honduras y, a la vez, en la respuesta coordinada del Equipo Europa, de todos los Estados miembros y las instituciones europeas ante la crisis», por la COVID-19, dijo a Efe el embajador de España en Tegucigalpa, Guillermo Kirkpatrick.
Añadió que la asistencia tiene dos fases. La primera consiste en «la respuesta a la emergencia epidemiológica, en la que ya llevamos trabajando mucho tiempo», y tiene que ver con la recuperación del país y la reactivación económica, añadió.
En la segunda fase, en la que se contará con el crédito aprobado, hasta por 35 millones de dólares, será financiado «un proyecto integral de desarrollo rural y productividad de Honduras».
Se buscará, además, el ingreso sostenible de las familias hondureñas, específicamente de las que viven en la zona del corredor seco, mejorando el desarrollo productivo en una zona que es clave para la producción de alimentos y la recuperación económica.
AYUDA A FAMILIAS POBRES
El corredor seco de Honduras incluye comunidades del centro, sur y occidente, muchas de ellas afectadas todos los años por las pocas lluvias, lo que merma el rendimiento de la producción agrícola y ganadera, entre otras actividades del campo.
La ayuda a las familias del corredor seco, explicó el embajador Kirkpatrick, brindará tecnología y asistencia técnica productiva, además de acceso a la financiación a la población beneficiaria del proyecto, en lo que también contribuye el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que está aportando «una cantidad importante».
Con la Cooperación Española y el BID se espera desarrollar la zona del corredor seco y permitir a las familias, que desde hace muchos años son víctimas, principalmente de la sequía y una difícil situación económica, mejorar su situación, señaló el diplomático español.
La idea es mejorar el entorno productivo de las familias beneficiadas para que puedan desarrollarse y salir de la pobreza, añadió.
Kirkpatrick dijo que la ayuda española «viene a ratificar el compromiso de España en Honduras, un país prioritario para la Cooperación Española desde hace más de 30 años».
Honduras seguirá siendo prioritario para España, lo que el embajador considera que es una «buena noticia», y eso será ratificado en la próxima revisión del marco de cooperación bilateral entre los dos países, que será aprobada este año por la comisión bilateral.
En la próxima reunión bilateral serán aprobados nuevos fondos para Honduras, también no reembolsables, por un valor de hasta 200 millones de euros (172,4 millones de dólares), que vayan hasta el ejercicio presupuestario hasta el año 2024.
AYUDA ESPAÑOLA EN MOMENTO CRÍTICO
Kirkpatrick resaltó la importancia de la ayuda española a Honduras en el «momento tan crítico» que vive por la pandemia de COVID-19, a lo que se suma lo que ha sido la sequía, con efectos devastadores en los últimos años.
Indicó que la Cooperación Española siempre ha tenido como un objetivo «ayudar, muy particularmente, a los más desfavorecidos, a los más vulnerables» que viven en la zona del corredor seco.
El proyecto está alineado en lo que son las estrategias de respuesta rápida de la Cooperación Española frente a la pandemia en el mundo entero, en la que se han definido tres prioridades, la primera centrada en salvar vidas con apoyo de los órganos sanitarios y otras instituciones de respuesta a la emergencia epidemiológica.
La segunda prioridad se orienta a recuperar y defender derechos fundamentales, entre ellos la seguridad alimentaria, la educación la igualdad de género, acceso al agua y saneamiento, en lo que la Cooperación Española ha venido trabajando desde hace varios años.
Como tercera prioridad se busca proteger y recuperar los sistemas socioeconómicos, incluyendo la defensa del empleo y la protección social, para llevar bienestar a las familias pobres.
Durante la pandemia del coronavirus, España también ha venido cooperando con Honduras a través de organizaciones no gubernamentales como Médicos del Mundo y Cáritas, que han llevado material sanitario y de protección personal a centros asistenciales y comunidades remotas.
Se suma la donación de 130 respiradores de la Junta de Andalucía para los países de la región, a través del Sistema de la Integración Centroamericana (Sica).
COVID-19, UNA CRISIS QUE NADIE PODÍA VER VENIR
Sobre la pandemia, el diplomático español expresó que «se trata de una crisis que nadie podía ver venir, que ha golpeado a todos los países por igual, en diferentes momentos.
Es una crisis que es un problema común y «de ahí la importancia de que todos trabajemos en común para poder superarla», coordinando acciones, como está haciendo España, con los socios de la Unión Europea y las instituciones europeas, además de otros entes internacionales, como el BID, por ejemplo, subrayó Kirkpatrick.
También destacó la importancia de reforzar el multilateralismo y el trabajo, porque solamente unidos se podrá frenar el coronavrus.
Sobre la ayuda de España a Honduras en los últimos años, el embajador dijo que se han dedicado más de 180 millones de euros (209,7 millones de dólares) en diferentes proyectos y ahora se está «iniciando el nuevo ciclo, en el que las previsiones presupuestarias confirman que Honduras seguirá siendo un país prioritario para nosotros».
Las cifras estimadas para los próximos años rondará los 200 millones de euros (233 millones de dólares) para financiar diversos proyectos en los que se refleja «un compromiso reiterado y renovado de la Cooperación Española con Honduras», acotó Kirkpatrick.