Miami.- Empresarios y políticos demócratas y republicanos en Estados Unidos urgieron a los dos senadores por Florida, Marco Rubio y Rick Scott, comprometerse con una reforma migratoria en un estado con «una de cuatro personas nacidas en otro país» y con una agricultura dependiendo de estos inmigrantes.

Entre los republicanos estuvieron el congresista Mario Díaz-Balart, el exsecretario de Vivienda de EE.UU. Mel Martínez, el exgobernador de Florida Jeb Bush, mientras que por los demócratas participaron Nikki Fried, comisionada de Agricultura de Florida, y Daniella Levine Cava, alcaldesa de Miami, entro otros.

Mike Fernández, uno de los fundadores de la coalición Immigration Parnership and Coalition (IMPAC), organizadora del foro virtual y campaña, instó a los senadores Rubio y Scott a unirse a esa iniciativa titulada Florida prospera: Cumbre bipartidista de soluciones de inmigración 2021.

En el mismo sentido se pronunciaron los republicanos Martínez, quien también fue senador por Florida, y Bush.

Al recordar que él también es un inmigrante, el cubanoestadounidense Martínez instó a los gobiernos en Washington y Tallahassee, capital de Florida y sede del Gobierno del estado, a cargo de del republicano Ron DeSantis, «a escuchar».

«Es tiempo de poner la política a un lado», dijo Martínez al subrayar que quiere que otros inmigrantes tengan las mismas oportunidades que él tuvo.

Subrayó que una eventual reforma migratoria «tiene que ser bipartidista» y «en pasos graduales».

En el mismo sentido se pronunció Bush, gobernador de Florida entre 1999 y 2007, quien indicó que el estado «puede liderar el camino» de una solución migratoria al tener una «tradición bipartidista en inmigración».

Enfatizó que hay que «convencer» a los funcionares federales del estado que la reforma migratoria es «una prioridad».

Bush, que ha abogado desde hace años por una reforma migratoria humana, aseguró que los senadores estadounidenses tienen que «comenzar a construir el consenso».

Por su parte, Díaz Balart manifestó que se debe hacer un «esfuerzo bipartidista» y que «es un trabajo duro que hay que hacer porque el sistema no funciona».

Todos los invitados al foro coincidieron en que hay un consenso nacional de los votantes, que apoya mayoritariamente una reforma migratoria, incluidos republicanos, especialmente soluciones para los jóvenes soñadores de DACA, los trabajadores esenciales durante la pandemia y beneficiarios del Estatus de Protección Temporal (TPS).

En el foro virtual con una veintena de invitados, en el que no se nombró la reforma migratoria impulsada por el Gobierno del presidente Joe Biden, participaron empresarios, catedráticos, inmigrantes, como también el arzobispo de Miami, Thomas Wenski.

Rebeca Shi, directora ejecutiva de la Coalición Americana de Empresarios por la Inmigración (ABIC), pidió al cubanoestadounidense Rubio y a Scott, que gobernó a Florida entre 2011 y 2019, que «acompañen» a esta mayoría de votantes que favorecen una reforma migratoria «con sentido común».

La líder empresarial insistió que es «crítico» el papel de los inmigrantes en la economía del «estado del sol».

POR LA SUPERVIVENCIA DE LA AGRICULTURA

La alcaldesa de Miami, la demócrata Daniella Levine Cava, resaltó que los inmigrantes «son una cuarta parte de la fuerza laboral de Florida».

Aseguró que además son «trabajadores esenciales» y además «críticos» para la reconstrucción del estado tras la pandemia, que ha dejado cerca de 31.000 fallecido en Florida.

Los oradores repitieron una y otra vez la importancia de la mano de obra de los inmigrantes, especialmente en las industrias de turismo y agricultura, los dos motores económicos de Florida, como también en la construcción.

IMPAC fue precisamente fundada en 2017 por empresarios inmigrantes de éxito como Fernández, para impulsar una reforma migratoria y asesorar a indocumentados que enfrentaron la deportación durante las duras políticas migratorias del expresidente Donald Trump (2017-2021).

Fernández resaltó que se requieren de las contribuciones de inmigrantes, que no solo pagan impuestos sino que llenan vacantes en agricultura, restaurantes, tecnología e innumerables sectores.

Fried, la comisionada de Agricultura de Florida, la única demócrata en el gabinete de DeSantis, aseguró que los inmigrantes «son el corazón» de la agricultura en Florida.

Precisó que no le importa quiénes son ni de dónde vienen, solo que hay que protegerlos con una reforma migratoria y también contra la covid-19, que los ha afectado de forma desproporcionada en el país.

En ese sentido el republicano Díaz Balart dijo que se requiere de los inmigrantes «para producir comida en Estados Unidos», lo cual hace el asunto migratorio de «seguridad nacional» si el país no quiere depender de los productos de otras naciones.