Los Ángeles – La Administración del presidente Joe Biden rescindió este jueves una política implantada en los últimos días del Gobierno del hoy expresidente Donald Trump que dificultaba a los niños inmigrantes obtener asilo en Estados Unidos, según un información revelada por el medio periodístico BuzzFeed News.
La directriz del Gobierno conservador ordenaba a los agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) revisar si un menor indocumentado clasificado como “no acompañado” (AUC) a su ingreso aún se encontraba en este estatus, incluso si había cumplido 18 años y si había un tutor «disponible» en EE. UU. que pudiera cuidar de él o si ya lo estaba haciendo.
El cambio de clasificación afectaría las solicitudes de asilo de los menores, según habían advertido los defensores de los niños.
Este jueves Tae Johnson, director interino del ICE, envió al personal de la agencia un correo electrónico, al que tuvo acceso BuzzFeed, indicando que estaba rescindiendo la política y que, «con vigencia inmediata», los oficiales ya no tendrían que tomar la determinación en un esfuerzo por «prevenir la pérdida de las garantías procesales y legales creadas por el Congreso que fueron diseñadas para mantener seguros” a los niños inmigrantes no acompañados.
La marcha atrás hace parte de la política de la nueva Administración demócrata de poner fin a una serie de medidas aplicadas por Trump que dificultaban las solicitudes de asilo.
Hace menos de dos semanas el Gobierno de Biden comenzó a recibir a los inmigrantes que aguardaban en México la resolución de sus procesos de asiloen EE.UU. bajo el programa Protocolos de Protección a Migrantes (MPP), también conocido como «Permanezcan en México”, una de las políticas insignia de Trump.
Según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), unas 25.000 personas que aún están inscritas al programa serían elegibles para ingresar al país.
El anuncio de que se recibirá a estos inmigrantes alentó las esperanzas de muchos extranjeros que no están bajo el programa pero que buscan entrar a suelo estadounidense, entre ellos menores no acompañados.
Según CNN, los datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) evidencian una «tendencia creciente» de niños no acompañados que llegan al país y quedan bajo cuidado de las autoridades.
Esta situación supera la capacidad del Departamento de Salud y Servicios Humanos, del que depende la Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR), encargada del cuidado de los pequeños migrantes.
La versión detalla que en la ciudad de Yuma, en el estado fronterizo de Arizona, los datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) dan cuenta de que más de 600 personas de todas las edades estaban albergadas en un espacio diseñado para 104.
La situación se repite en el Valle del Río Grande, en Texas, donde más de 2.000 personas permanecían en un sitio con capacidad para albergar a 715.