México – El Gobierno de México celebrará el 14 y 15 de diciembre la consulta sobre el Tren Maya, según la convocatoria publicada este viernes y destinada a las comunidades indígenas y a la ciudadanía en general de los estados del sur y sureste del país por donde pasará el proyecto.
En la conferencia de prensa matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, el director de Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Rogelio Jiménez Pons, indicó que antes de la consulta se ha realizado durante este año un proceso preliminar en el que «se han recogido opiniones y vertido cuáles son las intenciones» del proyecto.
Ratificó que se prevé una inversión total de 120.000 millones de pesos (6.186 millones de dólares) en una zona con 12 millones de habitantes en cinco estados y 17 millones de turistas al año.
«Es una oportunidad para saldar la deuda histórica del país con el sureste de México», aseveró.
El funcionario indicó que, en cuanto al desarrollo social, se busca integrar a comunidades a cadenas productivas y generar valor agregado a sus productos, así como facilitar el acceso a mercados laborales, entre otros objetivos.
Sobre la protección al medioambiente, especificó que el proyecto contempla aplicar programas como «Sembrando vida» de reforestación, construir pasos para la fauna y proteger los corredores biológicos y respetar las reservas naturales.
Y en lo relativo a la cultura, afirmó que se pretende respetar y promover las tradiciones que identifican a los pueblos originarios y facilitar el acceso a zonas arqueológicas.
UN EJERCICIO «PARTICIPATIVO»
Por su parte, la subsecretaria de Gobernación para Desarrollo Democrático, Participación Social y Asuntos Religiosos, Diana Álvarez, explicó que el proceso constará de dos partes: un ejercicio participativo de la ciudadanía en general en las áreas de influencia del Tren Maya y una consulta específica a las comunidades indígenas.
Indicó que antes de la consulta -que decidirá la construcción o cancelación del proyecto- se enviarán brigadas informativas para promover la participación ciudadana, y a mediados de diciembre se instalarán módulos en los estados de Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, en los que los ciudadanos podrán expresar su opinión sobre el proyecto.
En su oportunidad, el director del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas, Adelfo Regino, enfatizó que en paralelo al ejercicio de participación ciudadana se efectuará la consulta indígena.
Señaló que la convocatoria a la participación, publicada este viernes en el Diario Oficial de la Federación, está dirigida a las autoridades e instituciones representativas de las comunidades.
«Hemos ubicado unas 3.425 localidades con 40 % y más de población indígena, que son los destinatarios de este proceso de consulta», expuso.
Regino señaló que se difundirá información, se dará un periodo de reflexión y se realizará la fase consultiva los días 14 y 15 de diciembre.
A su vez, el presidente López Obrador subrayó que se trata de una consulta vinculatoria. «Si la gente dice sí, vamos. Ya tenemos los estudios técnicos y los recursos. Si la gente dice no, hasta ahí llegamos. El pueblo manda», declaró.
El mandatario subrayó que inicialmente se había pensado financiar el proyecto mediante un crédito, pero que al final se decidió usar recursos propios.
«Tenemos ahorros. Siempre he dicho que la corrupción debe combatirse no solo por razones de índole moral, sino porque se liberan fondos para proyectos de desarrollo», dijo López Obrador, y se comprometió a terminar la obra durante su mandato en 2024.