Democratic Representative from Texas Joaquin Castro (2R) and members of the Congressional Hispanic Caucus comment on the Deferred Action for Childhood Arrivals (DACA) case being heard before the US Supreme Court, at the US Capitol in Washington, DC, USA, 12 November 2019. EFE/EPA/ERIK S. LESSER/File

Miami – Los grandes grupos latinos nacionales y de base en Estados Unidos celebraron este sábado el triunfo electoral de Joe Biden, al que le demandan medidas para corregir las políticas del presidente Donald Trump en materia migratoria y le recordaron al demócrata que sin sus votos difícilmente hubiera ganado en las urnas.

De los primeros en reaccionar fue el presidente del Caucus Hispano del Congreso, Joaquín Castro, quien consideró que la comunidad latina fue «esencial» para la victoria y pidió a Biden que su administración sea la «más diversa en la historia de los Estados Unidos» y los latinos estén «bien representados en todos los niveles».

En el mismo sentido se pronunció el presidente de la Cámara Hispana de Comercio en Estados Unidos (USHCC), Ramiro Cavazos, quien anticipó que sus prioridades serán nombrar a hispanos para puestos de alto nivel en la Casa Blanca y las agencias gubernamentales, un camino hacia la ciudadanía a los indocumentados como parte de una reforma migratoria, garantizar la seguridad fronteriza y dar mejor acceso educativo, médico y capital a los latinos, entre otras.

Y es que la reforma migratoria y la legalización de los 11 millones de indocumentados que viven en EE.UU. es la gran petición de los grupos de activistas, que quieren que Biden cumpla su promesa, aunque para ello necesitaría un acuerdo en el Congreso, y todavía se desconoce quién controlará el Senado federal.

Según datos de la encuesta a la salida de los centros de votación 2020 American Election Eve Poll, los latinos votaron masivamente por Biden, que recibió el 70 % del voto hispano, por el 27 % para el presidente Trump.

En estas elecciones los latinos se convirtieron en el segundo grupo de población más numeroso, tras los blancos no hispanos, con 32 millones de posibles votantes, y su voto jugó un papel vital en estados como Arizona, Pensilvania, Nevada y Florida, entre otros.

El director ejecutivo de la Asociación Nacional de Funcionarios Latinos Electos (NALEO, en inglés), Arturo Vargas, indicó que será fundamental para la Administración Biden «involucrar» al electorado latino y trabajar con ellos en políticas para mejorar la «calidad de vida» de esta comunidad.

PRESIÓN SOBRE BIDEN

La organización a favor de los inmigrantes United We Dream alertó de que ahora comienza una «lucha» por sus intereses y desde el primer día Biden debe «ponerse manos a la obra» para proteger a su comunidad y hacerlo con medidas a «largo plazo».

«No esperaremos a que Biden actúe (…) Le estamos diciendo a Biden que dé un paso al frente, porque los jóvenes inmigrantes han demostrado que somos capaces de cualquier cosa que nos propongamos», dijo la «soñadora» Greisa Martinez Rosas, directora ejecutiva de United We Dream Action.

Beth Werlin, directora ejecutiva del American Immigration Council, destacó que tras cuatro años de las «atrocidades de una agenda decididamente antiinmigrante y racista» de Trump, llegó la oportunidad de corregir los errores y lograr «avances mediante reformas duraderas» por medio de un sistema migratorio «justo y equitativo».

Oscar Chacón, director ejecutivo de Alianza Américas, recordó también que los votantes latinos «jugaron un papel crucial» y dejaron una «marca clara» de la importancia de su voto en el futuro, después de que la participación de los hispanos batiese «récords» el martes pasado.

CONTRARRESTAR LAS POLÍTICAS DE TRUMP

El responsable de Alianza Américas dijo que a partir de hoy comenzarán a trabar para exigir que el presidente electo deshaga «inmediatamente» las acciones ejecutivas «dañinas y antiinmigrantes» de Trump y trabaje con las comunidades para garantizar protecciones a largo plazo, en referencia también a la reforma migratoria.

Javier. H. Valdés, codirector ejecutivo del grupo de base Make the Road Action, que trabajó en estados clave como Nevada y Pennsylvania para animar a los latinos a votar, dijo que las personas de las minorías lideraron un «movimiento nacional y hoy derrotaron a Donald Trump».

Y, aseguró, votaron por una reforma migratoria «humana», mejor acceso a la atención médica y a la vivienda asequible, y ahora se esforzarán para la nueva administración lleve a cabo «políticas progresistas audaces» para ayudar a las comunidades que les llevaron a esta «victoria monumental».

Y Nicole Melaku, directora ejecutiva de la Asociación Nacional para Nuevos Estadounidenses (NPNA, en inglés), avisó al próximo Congreso y Gobierno de que tendrán que «rendir cuentas» y abordar los problemas que dejará la Administración Trump.

La directiva de esta organización nacional multiétnica y multirracial que representa a 41 de las organizaciones regionales de derechos de inmigrantes y refugiados más grandes en 37 estados dijo que los votantes de las minorías se unieron en «números récord» para elegir líderes que se «preocupen y gobiernen» por ellos.

LA PRIMERA VICEPRESIDENTA

La llegada a la Vicepresidencia de Kamala Harris como la primera mujer, y que además sea de color e hija de inmigrantes, representa un «orgullo» para las minorías, dijo la presidenta y directora ejecutiva de UnidosUS, Janet Murguía.

«Hemos confirmado que el voto latino fue el margen de la victoria en al menos Arizona, Florida y Nevada. Y claramente eso tuvo un impacto» en demócratas y republicanos, a los que pidió que no den por sentado el sentido del sufragio de esta variada comunidad, pues, les avisó, su «impacto solo va a crecer», señaló Murguía.

En el mismo sentido se mostró Angélica Salas, directora ejecutiva de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (CHIRLA), la organización de derechos de los inmigrantes más grande de California.

«Esta es una nueva normalidad y no vamos a abandonarla. Los latinos ayudan a hacer el futuro de este país y, de ahora en adelante, también ayudarán a votar su futuro», dijo.