Roma.- La situación de los 27 migrantes que desde 29 días esperan a bordo de un petrolero frente a Malta poder desembarcar es «desesperada» y «están amenazando con tirarse por la borda», según explicó a varios medios por primera vez el director de la sociedad Maersk Tankers, propietaria del buque, Tommy Thomassen.
La tripulación rescató a un grupo de 27 migrantes, incluida una mujer embarazada y un menor, el 5 de agosto, pero la negativa de Malta a permitirles desembarcar ha provocado la crisis más prolongado con un barco comercial en aguas de la Unión Europea.
Por primera vez desde el rescate rompe el silencio la naviera para explicar que «crece la frustración y la tensión entre los que están a bordo».
«Algunos de nuestros huéspedes en el Etienne han amenazado con tirarse por la borda por desesperación. Nuestro equipo logró disuadirlos, pero la situación se está volviendo cada vez más difícil «, dijo el director en declaraciones al diario «Times of Malta».
«Las raciones de comida y agua se están terminando debido a que las reservas del barco están casi agotadas», aseguró Thomassen, que explicó que «aunque el petrolero obviamente no está equipado para sostener a esa cantidad de personas, se ha logrado distribuir raciones y otros artículos básicos a todos».
Explican que hasta ahora no habían hablado porque intentaban resolver la situación de manera discreta hablando con personalidades a novel político e institucional directamente o a través de la Asociación Marítima Danesa.
«Hemos recogido buenas intenciones y mucha simpatía pero aún no hay solución. No hay fecha. La situación a bordo es muy difícil. El barco no está hecho para albergar a muchos pasajeros. La tensión es enorme. Queremos gritar nuestra solicitud de ayuda a todas las instituciones competentes», agregó el director técnico de la empresa en otra entrevista concedida al diario italiano «Il Manifesto».
«Si no fuera por el buen juicio del capitán, se habrían ahogado». El petrolero danés respondió a una llamada de socorro en la Zona de Búsqueda y Rescate de Malta y dijo que el Centro de Coordinación de Rescate de Malta (MRCC) había pedido a la tripulación que brindara asistencia, «por lo que no les quedó más remedio que rescatarlos debido a las peligrosas condiciones del mar», añadió el portavoz.
Según la compañía: «Si no fuera por el buen juicio del capitán, se habrían ahogado «, dijo Thomassen.
«Las empresas privadas no deberían tener que hacer un trabajo que deben realizar las autoridades regionales. Cumplimos con nuestro deber de salvar vidas en el mar, por lo que esperamos que las autoridades hagan lo mismo… Son héroes: salvaron a 27 personas, cumplieron con su deber. No es posible tratarlos así», añadió.
El lunes pasado, un portavoz de la Comisión Europea explicó que están trabajando para la redistribución de los 27 migrantes.
Por otra parte, los 353 migrantes a bordo del Sea Watch 4, operado por la ONG alemana del mismo nombre y Médicos sin Fronteras, fueron trasladados a un barco de pasajeros enviado por el Gobierno italiano frente a las costas de Palermo (en Sicilia) después de doce días de espera y ahora permanecerán a bordo dos semanas más para hacer cuarentena como prevención por la pandemia del coronavirus.