El padre Ismael Moreno posa con su libro "El norte que me tienes prometido", durante una entrevista con Efe el 20 de enero de 2021, en la ciudad de El Progreso, departamento de Yoro (Honduras). EFE/José Valle

Tegucigalpa – El ambiente en la sociedad hondureña se encuentra en punto de ebullición y eso provoca que el país inicie el 2023 con mucha expectativa, de acuerdo al sacerdote jesuita Ismael Moreno, también conocido como padre “Melo”.

“Es un ambiente de ebullición el que se está viviendo el país y arranca el 2023 con expectativas mucho más bajas con las que se inició el 2022 porque teníamos un nuevo gobierno con mucho entusiasmo; ese entusiasmo ha bajado considerablemente y las expectativas están puestas en este momento en la elección de los 15 magistrados”, expresó el religioso en declaraciones a la capitalina Radio América.

Reflexionó que el primer semestre de 2023 estará cargado de expectativas también por la elección del fiscal general y adjunto.

“Arranca el año sin tener claridad sobre el Presupuesto y sobre todo con el desafío de ponerse de acuerdo entre las bancadas. Un año que arranca entonces con mucha ebullición y con enormes expectativas por parte de la sociedad hondureña”, zanjó.

Además comentó que se está a la espera que la Junta Nominadora de proposición de candidatos a magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) remita al Congreso Nacional un listado con no menos de 45 candidatos.

“Ahí hay un enorme desafío, pero de igual forma nos encontramos arrancando el año con la enorme expectativa que está generando la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Honduras (CICIH)”, acotó el religioso.

Insistió que el ambiente en Honduras es de ebullición, por lo que la expectativa del siguiente año es alta.