Roma – El barco de la ONG alemana Sea Watch, con 406 migrantes a bordo rescatados en el Mediterráneo central entre el domingo y el lunes, desembarcará en el puerto siciliano de Pozzallo después de recibir hoy la autorización de las autoridades italianas.
«Tras días de espera, las autoridades italianas nos han asignado Pozzallo como puerto de desembarco», anunció en las redes sociales la ONG, que este miércoles había denunciado que la situación a bordo se estaba deteriorando también a causa de la espera y las malas condiciones climatológicas.
El barco, que partió hacia el Mediterráneo central el pasado día 10, había realizado en solo 24 horas, entre el domingo y el lunes, siete operaciones de rescate, salvando a 412 migrantes, de los que 150 son menores y niños, uno de ellos un bebe de una semana
En las últimas horas la Guardia Costera italiana respondió a las peticiones de la ONG y evacuó a seis mujeres, entre ellas una embarazada y a otras con graves quemaduras por carburante. Una de ellas dio a luz justo después de ser evacuada.
A los migrantes rescatados por el Sea Watch 3 se suman las 105 personas, entre ellas también muchos menores, que fueron puestas a salvo por el barco español humanitario Aita Mari el pasado 19 de octubre y que aún no ha recibido la autorización para desembarcar.
Ante la negativas de Malta a acoger a los migrantes rescatados, es Italia quien se está haciendo cargo de las llegadas de estas personas que zarpan desde las costas de Libia y Túnez en el intento de llegar a Europa.
El primer ministro italiano, Mario Draghi, afirmó antes de viajar a la cumbre europea que se desarrolla hoy que «este verano Italia ha seguido haciendo frente a sus obligaciones internacionales de salvamento marítimo» para «defender los valores europeos de solidaridad y acogida», pero consideró que «Europa debe esforzarse más» para «fomentar los canales de migración legal».
Más de 50.000 migrantes han desembarcado en Italia desde principios de año, casi el doble de los que llegaron en 2020, según los últimos datos publicados por el Ministerio del Interior italiano.
Según la OIM, más de 1.400 personas ya se han ahogado en el Mediterráneo en 2021, aunque hay que asumir un elevado número de casos no denunciados y más de 25.000 personas han sido devueltas a Libia.