San Cristóbal de las Casas (México) – En medio de una crisis migratoria en la frontera de México con Guatemala, la Caravana de Madres Centroamericana de Migrantes Desaparecidos llegó este martes para buscar a sus familiares y reclamar justicia al Gobierno de este país.
Alrededor de 50 mujeres de Guatemala, Honduras, El Salvador y Nicaragua llegaron con las imágenes de sus hijos desaparecidos a la ciudad mexicana de San Cristóbal de Las Casas, estado mexicano de Chiapas, la decimoquinta edición de esta caravana.
En su reclamo de justicia para los migrantes centroamericanos en tránsito, la caravana ha entrado a México acompañada por organizaciones civiles locales e internacionales y también por el Movimiento de Migrantes Mesoamericano (MMM).
Cantando “hijo escucha tu madre está en la lucha, quiero que sepas que te busco”, las madres centroamericanas entraron a San Cristóbal de las Casas con las fotografías de familiares en cuello o manos como amuletos protectores, para solicitar el apoyo para localizar a sus familiares.
Este año las madres instalaron un santuario de fotos en la plaza de la Paz para reclamar la ayuda del Gobierno.
Con fe y ánimo, las mujeres siguen el rastro de sus hijos y familiares en los rincones de las ciudades por donde ellos pudieron pasar, lugares de alta peligrosidad y con presencia de la delincuencia organizada.
Buscan en cárceles, en centros nocturnos, en albergues, morgues y en las plazas, en todos los sitios piden la ayuda de los pobladores y del Gobierno mexicano en busca de una pista de sus hijos.
Yolanda Ramírez, nativa de El Salvador, busca a su hija Ana María Ramírez de quien no sabe nada desde hace 14 años. Con lágrimas en los ojos dice a Efe tener fe que este año sabrá de ella.
“Me duele y a la vez le pido a Dios que le dé fuerza. Yo sueño que mi hija vive, que la veo con un niño que me llama ‘mamá aquí estoy’, sueño que está viva”, relata Ana.
Felicita Hueso de Zavaleta indicó que su hijo Wilmer Salvador Hueso Zabaleta había desaparecido hace 4 años cuando salió de su país para trabajar en Guatemala.
En su última llamada, Wilmer dijo que se encontraba en Tecun Uman (Guatemala) donde tramitaría de nueva cuenta su documentación para trabajar.
“Tenía como tres días que había salido, que ya no me di cuenta de él, a los tres días que había viajado de El Salvador a Mazatenango, Guatemala ya no supe más de él. Si tenía poco de haber venido, él se suponía que venía a trabajar porque en El Salvador era algo fregado para trabajar, hubo un tiempo que se puso muy peligroso”, alega.
Luci contreras, hermana de un migrante asesinado y recuperado después de dos años de búsqueda, dijo a los gobiernos que ayuden a las madres en su búsqueda.
A lo largo de los 15 años de caravanas se han localizado a 310 desaparecidos, dijo a Efe Rubén Figueroa, coordinador en el sureste del Movimiento de Migrantes Mesoamericano.
“Hemos logrado localizar más de 310 personas migrantes desaparecidas, algunos han culminado en recuentro con su familia. Es poco comparado con el gran número de personas desaparecidas, pero es mucho a lo que ha hecho el gobierno”, consideró.
Denunció que las violaciones de los derechos humanos de los migrantes continúan a lo largo de su intento de llegar a Estados Unidos.
«Siguen siendo perseguidos. Se le crean delitos, esa persecución con los migrantes lejos de bajar la incidencia de violencia ha crecido últimamente es por eso que las personas migrantes siguen desapareciendo”, señaló.
Exigió respeto a los derechos humanos de los migranes y el final de la corrupción de los gobierno de los estados por donde transitan; deben atacar «la corrupción, el crimen organizado y la violencia estructural”, dijo.
Las madres, acompañadas de diferentes ONG centroamericanas y mexicanas, continuarán su ruta por Tabasco, Veracruz, Puebla y Oaxaca, Ciudad de México, para continuar al norte.