Los Ángeles – Más de 60 menores indocumentados en dos albergues en Los Ángeles y que están bajo custodia del gubernamental Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) han dado positivo a la covid-19, un dato que genera preocupación entre los defensores de los inmigrantes.
De los 728 niños migrantes que se encuentran en el Centro de Convenciones de Long Beach, en el sur de California, 55 de ellos han dado positivo a los test de la covid-19 hasta este jueves, informó a la cadena ABC la portavoz de HHS Zhan Caplan.
A la cifra anterior se suman los 14 menores contagiados con coronavirus en el Pomona Fairplex, que el sábado comenzó a albergar a niños migrantes y hasta el momento tiene a 216 niños dentro de sus instalaciones.
De acuerdo a las autoridades federales, todos los niños que se hallan infectados se encuentran aislados y están siendo tratados.
Caplan dijo que en Long Beach se realiza pruebas de vigilancia cada tres días y los que dan positivo son trasladados a una carpa de aislamiento.
Precisó que «casi todos» los niños que dieron positivo en la prueba son asintomáticos, «con la excepción de uno que tiene síntomas muy leves».
Bonnie Preston, directora regional de HHS, dijo a la cadena que la mayoría de los casos se han dado entre niños que llegaron al centro ya con el virus.
Tras la abrumadora llegada a la frontera de menores sin compañía de un adulto, la Administración de Joe Biden se ha comprometido a trasladar rápidamente la custodia de los menores desde la Oficina de Control de Inmigración y Aduanas (CBP) al HHS, por lo que ha tenido que recurrir a abrir decenas de refugios a lo largo del país.
Los esfuerzos han rendido frutos. Según los últimos datos del Departamento de Seguridad Interna y el HSS, hasta este jueves solo habían 749 menores indocumentados bajo custodia de CBP mientras que a finales de marzo el número sobrepasaba los 5.000.
Actualmente hay 21.848 menores bajo la responsabilidad del HHS.
Las críticas, no obstante, se enfocan ahora en el tiempo que se toma el Gobierno para entregar a los menores a sus padres, familiares o tutores en el país.
Astrid Carolina Montealegre, abogada y presidenta de la Alianza Nicaraguense Americana por los Derechos Humanos (NARA), que representa al menor nicaraguense Wilton Eniel Gutiérrez Obregón, un caso que captó la atención nacional, dijo a Efe que es necesario que el HHS aumente el trámite de entrega de los pequeños a los familiares.
HHS explica en su página que los menores no acompañados pasan menos de 57 días en promedio en los refugios y no se integran en la comunidad local.