Miami – Las personas de minorías raciales/étnicas tienen cerca del doble de probabilidades de morir debido a una herida cerebral traumática, según un estudio publicado esta semana en el portal de internet «Frontiers in Surgery».
Los investigadores calcularon una tasa de riesgo de mortalidad hospitalaria de 2,21 para los pacientes de minorías en comparación con los pacientes blancos, «marcadas desigualdades» que fueron descubiertas por investigadores de la Universidad Health & Science de Oregón (OHSU, por su sigla en inglés).
El estudio exploró los resultados de mortalidad hospitalaria y las características de los pacientes adultos que ingresaron con lesión cerebral traumática en un centro médico de Portland, en Oregón, entre 2006 y octubre de 2017.
La tasa de mortalidad hospitalaria entre pacientes de las minorías fue del 14,6 %, mientras que entre los blancos no hispanos se reducía hasta el 8,5 %.
Los investigadores revisaron los resultados de 6.352 pacientes tratados por lesiones cerebrales traumáticas y la tasa de mortalidad general fue del 9,9 % entre todos los pacientes. Entre los 1.504 pacientes que se identificaron como pertenecientes a minorías raciales o étnicas, el 14,6 % murieron.
Los investigadores indicaron que los resultados sugieren que existen diferencias significativas incluso con similares gravedad de la lesión y factores económicos del paciente.
Los autores indicaron que esta situación se repite también en otras especialidades y que estas desigualdades «impregnan nuestra sociedad y contribuyen a resultados de salud desiguales», por lo que piden tomar medidas.
«El primer paso necesario para proporcionar un sistema de salud equitativo para todos los pacientes, independientemente de su condición socioeconómica, racial o étnica, es una conciencia continua de la omnipresencia y consistencia de estas disparidades médicas y los esfuerzos enfatizados para mejorar los factores sociológicos que las perpetúan», concluyó el estudio.
Sin embargo, los investigadores no encontraron ningún sesgo en el tratamiento que recibieron los pacientes mientras estaban en el hospital, como el número de días ingresados en cuidados intensivos y los cargos por servicios hospitalarios.
«Nuestros hallazgos apuntan al problema de una manera más sólida y clara. El problema tiene sus raíces en los determinantes sociales de la salud, incluidos factores como la dieta, el estilo de vida, las ocupaciones y el acceso a la atención médica», dijo el autor principal del estudio, Ahmed M. Raslan, profesor asociado de cirugía neurológica en la Facultad de Medicina de OHSU.