La incertidumbre se ha apoderado de un grupo de trabajadores mexicanos en el condado Farmingville en Nueva York, ante la continuación de los desalojos que les ha dejado como único hogar la intemperie. EFE/Miguel Rajmil/Archivo

Nueva York – Varias ONG y concejales de la ciudad de Nueva York han denunciado este martes que las autoridades federales y locales están ninguneando a los trabajadores del día a día e inmigrantes indocumentados, y han solicitado incentivos económicos y que sean provistos con material de protección contra la COVID-19.

«Como jornaleros y trabajadores inmigrantes en la ciudad de Nueva York, que garantizan que nuestra ciudad continúe operando de manera segura en medio de la crisis de COVID-19 (…), estos trabajadores y sus familias están siendo dejados aparte una vez más», aseguran en un comunicado firmado por las plataformas Worker’s Justice Project (WJP) y Day Labor Workforce Initiative (DLWI).

Las organizaciones sostienen que los inmigrantes de Nueva York constituyen «casi la mitad» de la mano de obra de la ciudad y están sufriendo el mayor índice de desempleo.

Asimismo, subrayan que 70 % de los trabajadores indocumentados ofrecen servicios esenciales de limpieza y de envío de comida a los hogares.

«Brindar apoyo económico a estos trabajadores asegurará que nuestras comunidades no vayan a ser devastadas por esta crisis y que la recuperación económica de toda la ciudad sea más rápida», dicen.

Sus reivindicaciones han sido recogidas por los concejales neoyorquinos Carlos Menchaca, Carlina Rivera y Debi Rose.

«Los jornaleros y los trabajadores inmigrantes ponen su seguridad en riesgo al trabajar para asegurar que nuestros lugares de trabajo y casas estén limpias y desinfectadas, que nuestra comida llegue a la casa y que los servicios esenciales siguan siendo garantizados a quienes lo necesitan», dice la nota, que incide en las dificultades que están sufriendo estos trabajadores.

Por todo ello, solicitan al estado y a la ciudad de Nueva York que ofrezca incentivos directos a las personas de este colectivo que no puedan acceder a los servicios oficiales como a la ayuda por desempleo y que se garantice «el apoyo y la protección de los jornaleros y otros trabajadores de primera línea, el pago de peligrosidad, así como la protección ante el robo de salarios y otras formas de abuso laboral».