Ginebra.- Las agencias de la ONU para derechos humanos y refugiados lamentaron hoy el anuncio de que el barco Aquarius no será usado más en el rescate de migrantes en el Mediterráneo y pidieron a los países involucrados que tomen rápidamente medidas para garantizar las labores de salvamento.

«La capacidad de rescate debería reforzarse en lugar de disminuir», sostuvo la portavoz de la Agencia de Naciones Unida para los Refugiados (ACNUR), Shabia Mantoo.

En rueda de prensa, Mantoo agregó que la ACNUR «urge» a los países a que ofrezcan soluciones «predecibles» para el desembarco de personas rescatadas en el Mediterráneo central.

«Salvar vidas debe ser la preocupación esencial», recalcó.

«Los arreglos para dar asistencia a los migrantes no deben ser criminalizados y la reducción de las tarea de búsqueda y rescate por parte de organizaciones humanitarias está resultando en el aumento de su vulnerabilidad», lamentó una portavoz del Alto Comisionado para los Derechos Humanos.

Todos los migrantes que enfrentan un riesgo para su vida y seguridad deben ser rescatados, agregó.

Las ONG SOS Méditerranée y Médicos Sin Fronteras (MSF) anunciaron el jueves que renunciaban a seguir fletando el Aquarius para efectuar esos rescates ante los obstáculos que han afrontado, aunque la primera de estas organizaciones está buscando un barco que pueda reemplazarlo.

SOS Méditerranée denunció que «los ataques incesantes de que han sido objeto el barco y su tripulación», les obligaron a tomar esa decisión.

En sus travesías, el equipo del Aquarius prestó asistencia a cerca de 30.000 personas en 34 meses.

En lo que va de año más de 2.100 personas han muerto en el Mediterráneo.