Los Ángeles – El plan de reforma migratoria demócrata se presentó este jueves en el Congreso y así el presidente Joe Biden cumplió su promesa electoral de abrir el camino a la ciudadanía a más de 11 millones de indocumentados y reformar un sistema que por décadas ha levantado críticas pero que no se ha logrado enmendar.
El senador Bob Menéndez, el latino de más alto rango en la Cámara alta, y la representante Linda Sánchez fueron los encargados de presentar el proyecto de la Ley de Ciudadanía Estadounidense de 2021, que enfrenta una cuesta arriba al tener que asegurar al menos 10 votos republicanos a favor en el Senado.
La propuesta pretende legalizar a millones de indocumentados que puedan demostrar su presencia en EE.UU. antes del 1 de enero de 2021 y no tengan antecedentes criminales.
Estos son diez puntos clave sobre cuáles, y cómo, los inmigrantes se verían favorecidos si el plan es aprobado en el Congreso:
1 – Los inmigrantes protegidos con los programas Acción Diferida (DACA) y Estatus de Protección Temporal (TPS) obtendrían la residencia permanente de forma inmediata y la ciudadanía en tres años.
Los trabajadores agrícolas que hayan laborado en el campo durante al menos cinco años también pueden solicitar directamente la residencia permanente y tres años más tarde podrían acceder a la ciudadanía estadounidense.
El resto de los indocumentados que cumplan los requisitos obtendrían un permiso temporal de cinco años, plazo tras el cual podrían solicitar la residencia permanente y tres años más tarde la naturalización.
2- El plan permite el acceso a la residencia permanente a algunos inmigrantes presentes con visas válidas como la H-2A, otorgada a campesinos, o cualquiera que «se haya involucrado en servicios o mano de obra de infraestructura crítica esencial”, específica el texto.
3- Se acelerarían el proceso de petición de familiares de residentes permanentes, lo que favorecería a un gran número de las llamadas parejas mixtas, compuestas por un portador de la «tarjeta verde» («green card») y un indocumentado.
4- Elimina el castigo de 3 y 10 años que prohíbe a los inmigrantes volver a EE.UU. por haber vivido de forma irregular en el país.
5- Ninguna persona que reúna los requisitos para acogerse al plan puede ser deportada mientras está en el proceso.
6- El proyecto de ley permitiría que cualquier persona que haga una solicitud para legalizarse obtenga un permiso de trabajo mientras el gobierno procesa la solicitud, lo que, dada la cantidad de peticionarios, podría demorar mucho tiempo.
7- Elimina el plazo de un año para presentar solicitudes de asilo, reduce los retrasos en las solicitudes de este beneficio, aumenta la protección para los peticionarios de visas U, T y VAWA, que protegen a víctimas de violencia doméstica y testigos de crímenes, entre otros.
8- El plan expande el número de visas otorgadas a los familiares de ciudadanos estadounidenses, eliminado esperas de años para ingresar legalmente al país.
9- El proyecto restaura una exención general para algunos argumentos que hacen inadmisible a un inmigrante para obtener una residencia permanente, y lo coloca en proceso de deportación.
10- El proyecto de ley también crea un programa piloto para estimular el desarrollo económico regional e incentiva salarios más altos para visas de no inmigrantes altamente calificados para evitar la competencia desleal con los trabajadores estadounidenses, una de las críticas más constantes de los legisladores republicanos.