Washington– Las remesas globales de migrantes a países en desarrollo crecerán un 7,3 % este año, hasta alcanzar los 589.000 millones de dólares, impulsadas por la subida del 21,6 % de los envíos destinados a América Latina y el Caribe, según las últimas previsiones del Banco Mundial (BM) divulgadas este miércoles.
Los cinco países que recibirán más remesas este año son India, China, México, Filipinas y Egipto.
El sólido repunte previsto para este año se produce después del descenso en 2020 del 1,7 %, en medio de la recesión mundial provocada la pandemia de covid-19.
«Los flujos de remesas de migrantes han complementado en gran medida las transferencias de efectivo de los Gobiernos en apoyo de las familias que sufrieron las adversidades durante la crisis», dijo Michal Rutkowski, director de Protección Social y Empleo del BM, en un comunicado.
Por ello, Rutkowski subrayó que «facilitar estos envíos para ofrecer alivio a las dificultades presupuestarias de los hogares debería ser un componente clave de las políticas gubernamentales».
Por segundo año consecutivo, señaló el informe del BM, las remesas de migrantes sobrepasarán la suma de la inversión directa extranjera y la asistencia al desarrollo internacional a estos países, exceptuando a China.
El coste de los envíos continuó al alza, con una media del 6,4 % de la cantidad, algo que el organismo internacional considera «demasiado elevado».
Entre las causas que contribuyen al fuerte aumento en las remesas figuran la «determinación» de los migrantes en apoyar a sus familias en tiempos de necesidad, así como la recuperación económica en Europa y EE.UU. basada en los agresivos programas de estímulo fiscal y de protección de empleo.
Por regiones, América Latina y el Caribe es la que se estima registrará un mayor auge, con un alza del 21,6 % respecto al pasado año; seguida por Oriente Medio y el Norte de África, con un aumento del 9,7 %; y el Sur de Asia, con un 8 %.
México es el país latinoamericano que más remesas recibirá, cerca de 53.000 millones de dólares este año, lo que supone un 42 % del total de la región.
El BM indicó que un factor «significativo» del incremento en Latinoamérica se encuentra en «el aumento en el número de migrantes en tránsito en México, y de las remesas que reciben del extranjero para sufragar sus costes de vida y viaje».
Algo similar ocurre en Guatemala y Colombia, así como Egipto y Marruecos, zonas de paso de migrantes africanos y de Oriente Medio.
La importancia de las remesas se ve reflejada en su fuerte peso en las economías de varios países latinoamericanos y caribeños, donde ronda el 20 % del producto interior bruto: como Honduras (26,6 %), El Salvador (26,2 %), Jamaica (23,6 %) y Guatemala (18 %).