Las Palmas de Gran Canaria (España).- El servicio español de Salvamento Marítimo y un barco pesquero consiguieron rescatar este domingo a 65 inmigrantes, incluidos cuatro niños y doce mujeres, de una lancha neumática que se hundía a más de 60 kilómetros de la isla atlántica canaria de Fuerteventura.
Siete de las personas se encontraban ya en el agua cuando fueron socorridas, informaron los servicios de emergencia.
Hace unos días, 52 inmigrantes murieron deshidratados o ahogados en el océano Atlántico cuando se desplazaban en una embarcación neumática que naufragó, con la que trataban de alcanzar las islas españolas de Canarias, según el testimonio de una mujer, única superviviente.
En los últimos meses, las ONG y servicios de emergencia han apreciado un aumento de las salidas de este tipo de embarcaciones precarias desde la franja de costa comprendida entre Tarfaya (Marruecos) y El Aaiún (Sáhara Occidental), como punto más cercano hasta las islas Canarias desde el continente africano (entre 100 y 125 kilómetros).
Sin embargo, estas lanchas no están preparadas para el océano abierto y, además, suelen ir sobrecargadas.
Los inmigrantes rescatados hoy fueron trasladados al puerto español de Gran Tarajal (Fuerteventura), donde un hombre fue hospitalizado grave con síntomas de ahogamiento y un niño fue ingresado con una deshidratación leve.
El rescate fue descrito en términos angustiosos por los medios que intervinieron en la operación, pues la ayuda llegó «en el último minuto», antes de que ocurriera una desgracia en circunstancias de mala mar (marejada con olas de dos metros).
Entre el 1 de enero y el 15 de agosto pasados, 8.222 inmigrantes llegaron por mar a las Canarias o fueron rescatados en las aguas próximas, un 144 por ciento más que el año pasado en igual período, según fuentes oficiales españolas. En todo 2020 fueron 23.000 las personas que entraron en estas islas de manera irregular.
Ayer mismo arribó a la isla de La Gomera a un cayuco (embarcación precaria) con 104 varones subsaharianos a bordo, entre ellos cinco niños.
Al menos 428 personas, entre ellas 64 mujeres y 25 niños, han muerto en lo que va de año intentando llegar en embarcaciones precarias a Canarias, según los últimos datos provisionales de la Organización de Naciones Unidas para las Migraciones, actualizado el 20 de agosto.