Tegucigalpa/Las Vegas – El boxeador de origen hondureño Teófimo López unificó el título de peso ligero de boxeo al derrotar por decisión unánime al ucraniano Vasyl Lomachenko y quedarse con las cuatro fajas de igual número de asociaciones mundiales y ser el nuevo campeón mundial indiscutido de la categoría de las 135 libras.
Los resultados de los jueces fueron 119-113, 119-109 y 117-112, sin dejar a dudas la superioridad de López durante los 12 asaltos. Varios comentaristas de boxeo no compartieron que los números fueron tan amplios.
Teófimo López ganó los títulos de peso ligero de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y Asociación Mundial de Boxeo (AMB), que los detentaba Lomachenko y retuvo el de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) que ya había ganado en noviembre pasado el boxeador de origen hondureño.
En sus palabras ya como campeón indiscutido de peso ligero, López agradeció a Dios y expresó que se siente bien al resultar ganador del combate.
“No me importaba las tarjetas tanto, tenía que ir por todo, cada vez que él me daba un (golpe), le daba uno, tenía que encontrar una manera de ganarle”, dijo López.
Comentó que parte de su estrategia fue no darle muchas oportunidades y cortarle su ataque.
López anunció que tiene intenciones de subir a la categoría de peso súper ligero, que es de 140 libras, y lograr también unificar el título en dicha categoría.
“Es hora de que una nueva generación tome el control, (haciendo referencia a su sobrenombre The Takeover), estamos listos en esta generación de tomar el control de este mundo”, declaró.
En su declaración a la cadena ESPN, López dijo que el triunfo es por Honduras y los latinos, en referencia al origen de sus padres y el país por el que participó en unas olimpiadas.
La pelea
Ambos pugilistas fueron precavidos en los primeros asaltos, López siendo opuesto a su estilo de atacar, mientras que el ucraniano analizaba a su adversario y buscó esperar para llegar al final de los 12 rounds.
El ucraniano continuó con su estrategia de esperar, desesperar al rival y atacar en el momento oportuno, por su parte, el boxeador de origen hondureño, atacaba más, pero no lograba conectar.
López dominó los primeros cinco rounds, aunque no lograba conectar con el cuerpo del boxeador ucraniano, ya que de más de 200 golpes que lanzó, apenas más de 20 lograron conectar con el cuerpo de Lomachenko.
A partir del sexto asalto, Lomachenko aceleró su ofensiva contrarrestando los esfuerzos de ataques de López logrando desesperarlo.
Desde el octavo round, López tenía el ojo izquierdo morado producto de los golpes de Lomachenko y uno de los dos cabezazos que le dio, mientras que el ucraniano tuvo una pequeña herida en el puente de la nariz.
Lomachenko lograba conectar golpes, mientras López se desgastaba más intentando defenderse.
Para el último asalto, ambos pugilistas terminaron exhaustos, Teófimo López tuvo un corte cercano a la ceja derecha debido de un golpe de cabeza por el ucraniano.
Las tarjetas favorecieron a López y castigaron la excesiva cautela de Lomachenko, que temeroso del golpe demoledor de López no se fue mucho al ataque para concentrarse en su defensa.
López, además de hacerse con los cuatro fajones que representan igual número de títulos, amplió su número de victorias a 16 y con apenas 23 años comienza a sentar su nombre en el mundo del boxeo, buscando ya subir de peso a la categoría de súper ligeros de 140 libras.
Por su lado Lomachenko, con 32 años, buscará una revancha y recuperar las glorias logradas en la división de las 135 libras.
El triunfo de la noche del sábado coloca a Teófimo López en la categoría ligero de 135 libras en la gloria donde ya transitaron en el pasado Roberto “Mano de Piedra” Durán, el desaparecido nicaragüense Alexis Arguello y Oscar de la Hoya.
Tuvieron un paso por esta división el filipino Manny Pacquiao y el estadounidense Floyd Mayweather, que luego subieron a peso súper ligero de 140 libras y welter.