Redacción – El gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, anunció este jueves que ha mandado 30 agentes más del Departamento de Seguridad Pública (DPS) a Austin para ayudar a la seguridad a pesar de que el ayuntamiento terminó una asociación con su policía.
Con el envío de los agentes adicionales, Austin contará con 130 agentes del DPS en sus calles, explicó Abbott en un mensaje en su cuenta de Twitter.
El anuncio se da un día después que el alcalde de Austin, el demócrata Kirk Watson, anunciara que la ciudad había terminado una colaboración del DPS con la policía de la capital texana, que pretendía fortalecer la seguridad de la ciudad y agilizar la respuesta a las llamadas de emergencia al 911.
El Departamento de Policía de Austin ha enfrentado problemas para llenar más de 300 vacantes por lo que Watson acudió en marzo pasado a Abbott, para solicitar el respaldo de la policía estatal.
En una conferencia de prensa este jueves, Watson dijo que los agentes del DPS tienen jurisdicción en todo el estado y habían estado patrullando en Austin antes de que se estableciera la colaboración ahora suspendida, y que los policías estatales permanecerán en las calles de la ciudad.
Watson dijo que la asociación “fue un enfoque innovador para hacer frente a la grave escasez de personal que tardó años en gestarse. Sin embargo, cualquier enfoque debe estar sincronizado con los valores de Austin”.
Aunque la colaboración dio como resultado una disminución de los delitos violentos y con armas de fuego y menos muertes por accidentes de tráfico, se presentaron críticas después que la Oficina del Fiscal del condado de Travis revelara que alrededor de 9 de cada 10 personas arrestadas en la ciudad eran afroamericanas o latinas.
También se criticó el hecho de que el DPS estaba patrullando en gran medida los vecindarios predominantemente latinos y hubo incidentes. Por ejemplo, en el sur de la ciudad un agente de DPS había apuntado con un arma a un niño latino de 10 años, después de que su padre fuera detenido en una parada de tráfico.
“Desde el comienzo de esta asociación con DPS, dije que quería que los habitantes de Austin se sintieran seguros y estuvieran a salvo. Los eventos recientes demuestran que debemos suspender la asociación con DPS”, aseguró el alcalde demócrata.