San Pedro Sula – Una nueva caravana de migrantes ha empezado a formarse en los alrededores de la central metropolitana de transporte en San Pedro Sula, norte de Honduras.
Este lunes, a eso de las 7:00 de la noche, empezaron a llegar al lugar grupos de jóvenes quienes, tras breves conversaciones y reuniones entre ellos, han abandonado el lugar y han dicho que concentrarán su salida en pequeños grupos para luego, juntarse todos, en la zona fronteriza con Guatemala.
Los peregrinos son en su mayoría jóvenes, entre ellos menores de edad y han dicho que buscan oportunidades para trabajar en los Estados Unidos.
Un joven proveniente del departamento de La Paz dijo que en Honduras no hay oportunidades y que él no ha logrado un empleo en mucho tiempo, es por esa situación que sus padres le han apoyado en su partida.
Otro muchacho que llegó desde San Antonio de Cortés indicó que en el país (Honduras), no se puede vivir y que él necesita mantener a su familia y aunque ha buscado como hacerlo no ha encontrado un solo lugar donde poder trabajar.
Igualmente, un chico de 17 años que llegó a la terminal metropolitana dijo que “es mejor morir luchando que quedarse y morir de hambre”.
Poco a poco un par de mujeres con sus pequeños hijos también llegaron al lugar de la convocatoria, realizada por redes sociales y sin una fuente visible.
Esta vez, los participantes de la caravana se las ingenian para avanzar en su propósito, intentando no ser detenidos en el lugar de la reunión ya que debido al toque de queda por la pandemia, las autoridades realizan operativos en los que pueden ser detenidos.
En la terminal metropolitana de transporte también pueden observarse carpas de defensores humanitarios que buscan orientar a los emigrantes.
Mientras tanto, Estados Unidos a través de sus voceros y delegados para la región, como el diplomático Ricardo Zúniga, han insistido en decir que la frontera está cerrada y que este no es el momento para emprender una ruta que solo trae peligros para los viajeros.
Igualmente han dicho que colaborarán con los países del Triángulo Norte creando oportunidades y luchando por erradicar la corrupción, el crimen organizado y otras causas que contribuyen a la profundización de la pobreza y la exclusión en Honduras, Guatemala y El Salvador.
Desde 2014, las caravanas migratorias han sido una constante que con el tiempo han mostrado las más duras facetas del deterioro social y de la conflictividad en América Central.