Quito – Los venezolanos tendrán 60 días después de la emergencia sanitaria por COVID-19, para poder regularizar su situación en Ecuador, según informó a última hora del lunes el Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana.
«Ante la situación de emergencia que vive el país y el mundo, el presidente de la República, Lenín Moreno, suscribió el decreto ejecutivo 1.020 que concede una prórroga de 60 días a los ciudadanos venezolanos», reza un comunicado de la Cancillería.
La medida está destinada a que los nacionales de ese país puedan cumplir con el registro -iniciado a finales del año pasado- y culminar el proceso de regularización con la obtención de la visa de residencia temporal por razones humanitarias (VERHU).
El canciller ecuatoriano, José Valencia y la ministra de Gobierno, María Paula Romo, suscribieron igualmente el decreto el lunes, como encargados de su ejecución, precisó la nota.
Esta prórroga, que se concede por las circunstancias extraordinarias que vive el país, «empezará a contar desde la terminación del estado de excepción».
El decreto ratifica además la validez de los pasaportes de los ciudadanos venezolanos, hasta cinco años después de la fecha de caducidad contemplada en los mismos, para todos los efectos legales dentro del territorio ecuatoriano.
El pasado 16 de marzo, Ecuador anunció la ampliación hasta el próximo 31 de mayo del plazo de registro de los ciudadanos venezolanos en el país andino, que en un principio vencía el 31 de marzo.
En los últimos años han pasado por Ecuador alrededor de 1,6 millones de venezolanos, de los que unos 400.000 se habrían quedado en el país y el resto seguido viaje a otros países, sobre todo Chile y Perú.
El pasado verano, ante previsiones de que su número crecería hasta finalizar 2019 llegando al medio millón, Moreno anunció la exigencia de una visa humanitaria y un censo con el fin de conocer el alcance de esta migración y poder planificar políticas de estado.
Ello supuso un descenso dramático en la migración, de un promedio de 1.500 diarios a varias decenas semanales.
De los que se han radicado en el país estos últimos años, apenas unos 125.000 han obtenido o aplicado a algún tipo de visado, por lo que la gran mayoría ni siquiera constaba en los registros civiles.
El Ejecutivo ecuatoriano inició a finales del año pasado el proceso de registro migratorio de venezolanos y la verificación por el Ministerio de Gobierno (Interior) de que el solicitante es apto para el nuevo visado.
Para lograr la visa se requiere un pasaporte (con fecha de caducidad máxima de hace cinco años) y un certificado de antecedentes penales apostillado en el caso de los adultos.
Para los menores de edad, no es obligatorio un pasaporte pero sí un certificado de nacimiento, y el procedimiento se gestiona cara a cara delante de un funcionario.