Migrante hondureño -izq.- hace gestiones ante el Instituto Guatemalteco de Migración luego de ser enviado por Estados Unidos dentro del convenio migratorio con Guatemala.

Tegucigalpa – Luego de la llegada del inmigrante hondureño, Erwin Ardón, como parte de los acuerdos migratorios firmados meses atrás, ha vuelto a abrir el debate en Guatemala sobre si se trata de un simple pacto de cooperación en asilo o abre la puerta a un “tercer país seguro”.

-Según Acnur, el concepto de “Tercer país seguro” es “usado como parte de los procedimientos de asilo para transferir la responsabilidad del examen de una solicitud de asilo de un país de acogida a otro país que es considerado ‘seguro’”.

En ese sentido, los ministros de Interior y Exteriores de Guatemala, Enrique Degenhart y Sandra Jovel, respectivamente, recibieron el jueves al primer migrante hondureño retornado producto del acuerdo migratorio que firmó el país centroamericano hace casi cuatro meses con Estados Unidos.

No obstante, excancilleres guatemaltecos señalan una serie de ilegalidades que comete el Organismo Ejecutivo al darle cumplimiento a dicho acuerdo.

Al respecto, el excanciller Gabriel Orellana aseguró que hay que tomar en cuenta varias consideraciones, una es el artículo 30 de la Constitución, que establece el principio de publicidad de los actos de la administración y en este caso no se puede invocar ninguna reversa discreto-diplomático, porque este convenio ya Estados Unidos lo hizo público. En otras palabras, según Orellana, se perdió la supuesta secretividad que pudiera tener por disposición unilateral de una de las partes.

El excanciller reflexionó sobre el auto de suspensión provisional de la Corte de Constitucionalidad en los artículos 183 literal K y 172 de la Constitución, en la que se establece la obligación del Presidente de mandar al Congreso para su aprobación los tratados y convenios internacionales, no hace ninguna distinción.

“El Congreso debe recibir el convenio o tratado y calificar si le corresponde o no darle su aprobación, pero no puede el Presidente decidir, discrecionalmente si lo manda o no. Entonces aquí no hay vuelta de hoja el Presidente debe cumplir con la Constitución y si no lo hace incurre en delito precisamente por desacatarla. El Ministro de Gobernación y la Canciller, han incurrido en delito en el momento mismo en que ellos tenían la obligación de cumplir con lo que manda la Constitución y regirse a lo que manda la CC, que era enviar la copia de los convenios conforme se iban produciendo” manifestó Orellana a medios locales.

Después de llegar en un vuelo en el que viajó solo desde El Paso, Texas (EE.UU.), el migrante hondureño, cuya identidad ha sido reservada por confidencialidad, solicitó apoyo para retornar a su país «inmediatamente», con la ayuda de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).

La OIM lo trasladó a un albergue, cuya ubicación se tiene bajo reserva, para atenderlo médicamente y, en los próximos días, llevarlo a Honduras, de acuerdo al Programa de Asistencia Humanitaria y Retorno Voluntario Asistido lanzado por la entidad internacional este miércoles.

La próxima semana llegarán a Guatemala «más vuelos» de migrantes salvadoreños y hondureños, se confirmó.

El acuerdo entre Guatemala y EE.UU. estipula entre otras cosas que no aplica a ciudadanos guatemaltecos o a quienes residan en ese país.

Además, prevé la transferencia de solicitantes de asilo de Estados Unidos a Guatemala, quienes serán responsabilidad del primer país hasta que se haya completado el proceso de traslado.

El documento establece que Guatemala no podrá devolver o expulsar a los solicitantes transferidos desde territorio estadounidense, a menos que estos cancelen su solicitud o que esta haya sido rechaza mediante una decisión administrativa.

Según lo suscrito, Estados Unidos «colaborará con Guatemala para identificar a los individuos apropiados para ser transferidos al territorio de Guatemala».

Ambos países acordaron trabajar en un plan de implementación inicial, que defina los procedimientos para el traslado de las personas, el volumen o número de cobijados por el acuerdo y otros detalles.