Washington – El Gobierno no descarta poner en marcha una prohibición de viajes a su territorio desde países latinoamericanos, como Ecuador y Brasil, similar a la aplicada a las 26 naciones de la zona Schengen en Europa, para evitar la propagación del coronavirus.
Un funcionario de alto rango del Departamento de Seguridad Nacional estadounidense señaló en una rueda de prensa telefónica que están evaluando la situación país por país.
En ese sentido, apuntó que su Gobierno está observando la evolución en naciones como Brasil y Ecuador, donde «hay un aumento significativo de los casos, hay una aceleración».
En cuanto a la deportación de inmigrantes por parte de EE.UU. a estados centroamericanos, como El Salvador, Guatemala y Honduras, el funcionario destacó que su Ejecutivo está cooperando con los Gobiernos de esos países para continuar con la devolución de esas personas.
«Hay países que no tiene restricciones a los viajes y se pueden usar vuelos comerciales, pero lo estamos haciendo cada vez menos y estamos empleado vuelos chárter, donde sabemos quién va y podemos informar a los países receptores sobre quiénes están dentro del avión», indicó el funcionario.
En el último año, Washington ha firmado varios acuerdos con naciones centroamericanas para facilitar la deportación de los inmigrantes indocumentados que lleguen a sus fronteras.
Como consecuencia de la crisis del coronavirus, desde el sábado, están prohibidos los viajes no esenciales en la frontera entre EE.UU. y México, tras un convenio alcanzado entre ambos países; una medida similar a la pactada con Canadá.
El funcionario estadounidense subrayó que, desde la entrada en vigor de estas medidas, «ha habido una caída de dos tercios en el tráfico en la frontera sur» y de un 75 % en el límite con Canadá, y apuntó que estas medidas podrías estar en vigor «hasta que se vuelva a la normalidad».
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la pandemia de COVID-19 ha provocado ya 332.935 contagiados y 14.510 muertos en 190 países, de los que 33.404 infectados y 400 fallecidos se localizan en EE.UU.