Tegucigalpa – El temor le acompañaba noche y día al periodista Francisco Ramírez Amador, porque sabía que la muerte le rondaba y lastimosamente la institucionalidad le falló, porque pese a que había agotado varias instancias, quienes le perseguían lograron su propósito y lo asesinaron.

-Pese a que el periodista Francisco Ramirez, gozaba de medidas de protección, se convirtió en el segundo comunicador asesinado en 2023.

-Organismos internacionales lamentan muerte de comunicador e instan a autoridades a realizar una investigación exhaustiva.

 -Asociaciones de defensores temen por la vida de otros periodistas que están bajo amenaza, igual que líderes defensores de ddhh.

Ramírez Amador, quien laboraba en Canal -24, se convierte en la víctima número 100, de periodistas y comunicadores en el ejercicio de su profesión, según datos de C-Libre, otros organismos como el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH), manejan un número de 98, pero la disparidad en la cifra se debe a que no hay un informe oficial y algunos suman más casos que otros.

El comunicador social y también empleado del Ministerio Público Francisco Javier Ramírez Amador

Institucionalidad fallida

A los periodistas solo les queda ir sumando estadísticas porque, los asesinatos quedan en la impunidad y es un grupo vulnerable donde muchos están en estado de indefensión, ante la vista y paciencia del Estado que hace poco o nada.

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“Con el asesinato de Francisco, ya llegamos a los 100 asesinatos de periodistas y comunicadores sociales desde 2001 a la fecha, se trata del sexto periodista asesinado durante el Gobierno de Xiomara Castro y el segundo de 2023”, relato la directora de C-Libre Amada Ponce a Proceso Digital.

Uno de los elementos que se destacan en este asesinato, y que hay que lamentar es que Francisco Ramírez Amador, era beneficiario de medidas de protección por parte de Mecanismo Nacional de Protección y además estaba acogido a la Unidad de Desplazados de Derechos Humanos de la Secretaría de DDHH, “hubo muchísimas fallas en el hecho de proteger su vida”, adicionó.

Seguidamente, detalló que una de las principales fallas fue que el pasado mes de noviembre se solicitó el aumento de la escolta y la Policía Nacional, le negó esa posibilidad.

Previo a esa petición, el comunicador social estuvo acogido por espacio de seis meses, bajo el resguardo del Consejo Noruego para Refugiados, luego que había sido víctima de un atentado en mayo del 2023.

En la actualidad Francisco estaba a la espera de una resolución para solicitar un estatus migratorio de refugiado o de asilado político, no obstante, esa respuesta no llegó a tiempo y el comunicador fue asesinado.

Finalmente, la directora de C-Libre, dijo que, pese a que él había agotado muchas instancias en busca de ayuda porque tenía temor y sabía que su vida corría peligro por el ejercicio de su profesión “la institucionalidad le falló a Francisco, y no es la primera vez que personas que gozan de medidas de protección han muerto”.

Una muerte anunciada

El temor de Francisco se hizo realidad, él había expresado públicamente el temor que sentía de perder su vida y lo había compartido con varios organismos.

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Así lo confirmó la representante de la ONU en Honduras, Alice Shackelford quien lamentó la muerte del comunicador y compartió que él le había expresado su temor.

“Es terrible escuchar del asesinado del periodista Francisco Ramírez, bajo medidas de protección. Lo había encontrado en Danlí hace algunos meses y me habló de cómo se sentía en peligro de vida. Qué triste saber que no se ha logrado proteger. Un llamado para prontas investigaciones”, expresó la alta funcionaria a través de su cuenta de X.

El Comité por la Libre Expresión, después del atentado que el comunicador había sido víctima en mayo de 2023, levantó una alerta para dar aviso sobre los hechos, al tiempo que advirtió la ola de agresiones que sufre la prensa en esa zona del país, que van desde amenazas por parte de grupos criminales que pretenden imponer la pauta informativa en los canales locales, hasta el cierre de medios de comunicación y ahora asesinatos de comunicadores sociales.

En peligro de muerte otros periodistas

Por su parte, la directora ejecutiva de la Asociación por la Democracia y los Derechos Humanos (Asopodehu), Dina Meza, dijo a Proceso Digital, que lo que evidencia este último asesinato del periodista Francisco Ramírez, es que no hay protección para los periodistas.

Con este caso crece la preocupación sobre otros colegas que han sido amenazados y corren peligro de muerte, expuso la periodista y defensora de derechos humanos a Proceso Digital.

la directora ejecutiva de la Asociación por la Democracia y los Derechos Humanos (Asopodehu), Dina Meza

“Tengo un temor con tres colegas del occidente del país, incluso uno fue hasta secuestrado, (…) los tres por tratar temas de medio ambiente, los casos tienen en común que han denunciado tala de árboles”, agregó.

De igual forma, mencionó el caso de otro colega en Siguatepeque que también tiene amenazas.

Seguidamente, relató que por parte de Asopodehu, han viajado a esas zonas, y han comprobado que han aumentado las amenazas en contra de la prensa. El temor por la vida de estos y otros colegas es constante y se han remitido al Mecanismo de Protección, pero el trámite no es expedito y aducen que en muchas situaciones no tienen la competencia ni cuentan con los recursos, por ejemplo, para sacar a alguien fuera del país.

La muerte violenta del periodista Francisco Ramírez reedita los casos de la lista de muerte de otros periodistas que se mantiene en más del 90 % de impunidad.

La titular del Conadeh, Blanca Izaguirre

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Asociaciones de periodistas, igual que organismos internacionales, exigen que se haga una investigación exhaustiva, de este reciente caso y todos los anteriores, y que no solo se toque el tema en el momento que ocurre la tragedia y después se dejen en el olvido.