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Nueva York – Varios autobuses con migrantes han llegado a ciudades de Nueva Jersey sorteando las restricciones impuestas el pasado miércoles por el alcalde de Nueva York para contener la crisis migratoria, según indicaron en las últimas horas las autoridades del estado.

La ciudad de Jersey City, cercana a la Gran Manzana, indicó en la red social X (antes Twitter) el domingo que una decena de autobuses de Texas y uno de Luisiana llegaron al estado durante el fin de semana de Año Nuevo con casi 400 migrantes, que aparentemente toman trenes hacia Nueva York.

Los acontecimientos se producen después de que el alcalde neoyorquino, el demócrata Eric Adams, intentara limitar, con una orden ejecutiva que impone notificaciones y castigos, la llegada de autobuses con inmigrantes de otros estados a solo de lunes a viernes por la mañana.

El gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, dijo la noche del domingo a través de un portavoz al medio Politico que ha registrado la llegada de “un puñado de buses con familias migrantes en varias estaciones de tren” y consideró que el estado está siendo usado como “punto de tránsito” para sortear la orden de Adams.

“Todos o casi todos continuaron sus viajes hacia el destino final de la ciudad de Nueva York”, agregó el portavoz, que sostuvo que las autoridades a nivel local y federal se están coordinando para tratar el asunto.

Según la publicación de Jersey City, los autobuses han llegado a estaciones de Secaucus, Fanwood, Edison y Trenton, que tienen conexiones de tren en torno a una hora con la Gran Manzana.

La orden ejecutiva del alcalde Adams exige que los autobuses chárter con inmigrantes enviados desde otros estados notifiquen a la ciudad con 32 horas de antelación y, de no hacerlo, se considerará un delito menor, con posibles multas, demandas, e incluso la confiscación de los vehículos.

Según los últimos datos de la Alcaldía, han llegado a Nueva York más de 161.000 inmigrantes desde abril de 2022 y unos 68.000 están bajo cuidado de la ciudad, lo que “ha generado un agujero presupuestario” de 12.000 millones de dólares para mediados de 2025, en palabras de Adams.

En la primavera de 2022, el gobernador de Texas, Greg Abbott, comenzó a enviar autobuses con inmigrantes a ciudades con alcaldes demócratas, primero Washington y luego a Nueva York, para, según el republicano, repartir la carga migratoria que afronta su estado por las políticas de la Administración del presidente Joe Biden.

También ha enviado inmigrantes a Boston (Massachusetts), a Denver (Colorado), Filadelfia (Pensilvania) y Los Ángeles (California).