Nueva York – El Departamento de Justicia estadounidense solicitó este martes al Tribunal Supremo que permita a los agentes de la patrulla fronteriza cortar el alambre de púas instalado por Texas en la frontera sur para tratar de reducir la inmigración ilegal.

En una solicitud recogida por los medios estadounidenses, la procuradora general de Estados Unidos, Elizabeth Prelogar, pidió a la mayor instancia judicial del país que deje sin efecto la orden de un tribunal de apelaciones, que el mes pasado falló a favor de las autoridades de Texas y prohibió a los agentes federales manipular el alambre salvo en casos de emergencia médica.

«La orden prohíbe a los agentes mover o pasar a través de obstáculos físicos desplegados por el estado que previenen el acceso a la misma frontera que deben patrullar», explicó en su solicitud Prelogar.

El alambre de púas instalado por Texas en la frontera es parte de una serie de medidas contra la inmigración ilegal del gobernador texano, Greg Abbott, conocidas como «Operación Estrella Solitaria», y que también incluyen la instalación de una barrera flotante de boyas sobre el río Grande o el envío masivo de migrantes en autobuses a ciudades gobernadas por demócratas.

El pasado jueves, el Gobierno estadounidense amenazó con demandar a Texas si aplica una nueva ley migratoria que convierte en crimen la entrada irregular de personas desde México, y que es considerada por expertos como una de las leyes antiinmigrantes más estrictas en la historia del país.

En lo que va de año, las autoridades estadounidenses han registrado más de 2 millones de ‘encuentros’ con migrantes en la frontera sur, la mayoría de ellos arrestos de personas que intentaron cruzar de manera irregular.

El continente registra un aumento histórico en el movimiento de personas, impulsado por la búsqueda de mejores oportunidades económicas y las diferentes crisis sociales y políticas en países de la región.