Tapachula (México) – La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) del Gobierno previó este lunes un aumento de un 30 % en la atención diaria de solicitantes en sus nuevas oficinas en Tapachula, en la frontera de México con Guatemala, ante la nueva oleada de migrantes.

Daladier Anzueto, coordinador de la Comar en Chiapas, explicó en una entrevista con EFE que atendían entre 1.800 y 2.000 personas diarias, pero ante el flujo migratorio abrieron un nuevo espacio en el Parque Ecológico de Tapachula para atender de 2.600 a hasta 2.800 al día.

Además, manifestó que elevarán sus capacidades hasta en un 20 % con la llegada de personal de la subsecretaría federal de Gobernación.

El funcionario reconoció que “en una oleada masiva de personas siempre se generan dudas”, pero argumentó que “no hay ningún país que tenga la capacidad para atender, en toda la extensión de la palabra” a una cantidad de migrantes como la que ha llegado en las últimas semanas a la frontera sur de México.

“No obstante, desde el Gobierno mexicano, con el apoyo de la ACNUR (la agencia de la ONU para los refugiados) muy fuerte, y las diferentes instituciones, estamos enfrentando esta nueva oleada. Es por eso que nos cambiamos y tenemos mayores refuerzos”, indicó.

México vive una nueva ola migratoria, como mostró la semana pasada la suspensión de 60 trenes de carga de la empresa Ferromex por la presencia de más de 4.000 migrantes en los carros y en las vías, manifestaciones, y estampidas de miles de migrantes en las oficinas de atención a refugiados en la frontera sur.

Dentro de este flujo llegó de Honduras Oscar Emanuel Leiva, quien busca un permiso humanitario para llegar a Estados Unidos tras huir de su país por la discriminación y la violencia de las pandillas por pertenecer a la comunidad LGBTI.

“Nosotros queremos cruzar México de una forma legal para no tener problemas con pandillas, ni cárteles, ni nada de eso, hacerlo bien, no de una forma ilegal, por lo que nos dijeron que nos iban a atender. Nosotros tenemos una semana haciendo fila porque nos agarran y nos deportan a nuestro país”, expresó.

Otro de los migrantes es el cubano Juan Carlos, quien pidió al Gobierno mexicano que les permita salir de la frontera con Guatemala.

“Lo único que queremos es un permiso para poder llegar a la Ciudad de México para poder aplicar a la aplicación de CBP One (con la que Estados Unidos procesa las solicitudes de asilo), aquí no podemos, estamos varados, no hay trabajo”, lamentó.

Comar atendió la semana pasada cerca de unas 10.000 personas cubanas, haitianas, hondureñas, salvadoreñas, ecuatorianas, colombianas y, en menor medida de Guatemala.

“Como lo hemos dicho en diferentes foros, mientras las causas no sean atendidas, el fenómeno migratorio y la búsqueda de refugio va continuar”, expresó el funcionario de la Comar.