Tegucigalpa – La determinación de Costa Rica de pedir una solicitud de visas a los ciudadanos hondureños es un retroceso en la integración pero no una catástrofe, manifestó este sábado el embajador de Honduras en esa nación, Carlos Orbin Montoya.

“Esto es un retroceso a la integración, sin embargo, no es una catástrofe”, dijo el embajador al noticiero HCH.

Aclaró que los hondureños que son residentes en Costa Rica no tendrán problemas, asegurando que su residencia es legal y gozan del respeto de la legislación.

Montoya explicó que esta medida es parte de las medidas regulatorias que está implementando el país a causa del volumen de personas que emigran procedente de Sudamérica.

Comentó que ambas cancillerías seguirán negociando para ver como esas visas tienen una categoría de transferencia y de prontitud.

Consultado sobre el mercado común entre ambas naciones, el diplomático hondureño contestó que no hay un problema indicando que hay un Tratado de Libre Comercio (TLC) con Canadá, México y Estados Unidos, que son países que exigen visas.

Nosotros compramos más de lo que le vendemos a Costa Rica, en ese sentido, no vemos un entorpecimiento, puntualizó.

No debe alarmarnos es un tratamiento especial, así como lo hemos tenido nosotros con otros países, esclareció.