Washington – Unas 870 mil personas solicitaron la semana pasada el subsidio por desempleo, comparado con 866.000 la semana anterior, mientras continúa el impacto de la pandemia de COVID-19 en el mercado laboral de Estados Unidos, según informó hoy el Departamento de Trabajo.
El promedio de solicitudes en cuatro semanas, una medida que compensa las variaciones semanales, bajó a 878.250 en la semana que terminó el 19 de septiembre, comparado con el de 912.000 de la semana anterior.
El informe de la Oficina de Estadísticas Laborales indica que la semana pasada había 12,58 millones de personas que recibían la prestación convencional por desempleo, comparadas con los 12,63 millones en la semana anterior.
Las solicitudes del subsidio convencional han disminuido sustancialmente desde que en la última semana de marzo llegaron a 6,8 millones, pero en semanas recientes se han mantenido por encima de las 800.000, esto es cuatro veces más que las cifras en los meses anteriores a la pandemia.
Entre marzo y abril, la mayor economía del mundo perdió casi 22 millones de empleos y aunque desde entonces ha mostrado una recuperación, el ritmo de contratación de trabajadores ha mermado en los últimos dos meses.
Este dato semanal no incluye a más de 16 millones de personas que recibían un subsidio semanal de 600 dólares bajo un programa de emergencia aprobado por el Congreso y promulgado por el presidente Donald Trump en marzo.
El programa, que amparaba a trabajadores independientes y contratistas excluidos del subsidio convencional, concluyó a finales de julio y el Congreso no ha llegado a un acuerdo para extenderlo.
En agosto, Trump firmó un decreto autorizando un subsidio semanal de 300 dólares, que requiere la participación de los gobiernos estatales con 100 dólares adicionales, en un programa con una duración de sólo seis semanas.