US President Donald J. Trump returns to the White House after the Justice Department released a summary of special counsel Robert Mueller's report in Washington, DC, USA. EFE

Tegucigalpa – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, relajó en las últimas horas su discurso anti migratorio y capituló su amenaza de cerrar la frontera sur de su país con México, país al que concedió un año para frenar el tráfico de drogas a través de la línea fronteriza.

-El presidente estadounidense visitará la frontera sur este viernes, para supervisar la construcción de una barrera cerca de San Diego (California).

No obstante, este plazo también va acompañado de una amenaza, la cual se centra en imponer aranceles a los automóviles fabricados en suelo azteca.

«La única cosa mejor, pero menos drástica que cerrar la frontera, es imponer tarifas a los coches que entran», explicó. «Les vamos a dar una advertencia de un año, y si las drogas no dejan de entrar… vamos a imponer tarifas a México y sus productos, en partículas los coches», advirtió Trump.

El martes el presidente reconoció que México está escalando sus esfuerzos por detener el cruce de migrantes indocumentados, aunque aclaró que estaba totalmente preparado para cerrar la frontera, a pesar del costo económico que la medida inédita tendría para ambas naciones.

Como ya ocurrió en otras ocasiones, el jueves el presidente estadounidense Donald Trump reculó de su amenaza de cerrar la frontera con México. Después de un intenso lobby por parte de legisladores de ambos partidos, el mandatario movió su fecha de esta semana a dentro de un año.

Trump dio así marcha atrás a su amenaza de cerrar la frontera en los próximos días, casi una semana después de exigir que México detuviera de inmediato el flujo de inmigrantes indocumentados que atraviesan su país hacia Estados Unidos, o de lo contrario clausuraría esa zona limítrofe, quizá antes de este viernes.

El presidente no habló específicamente sobre esa amenaza, pero aseguró que “México entiende que vamos a cerrar la frontera o a poner aranceles a los automóviles, será una cosa o la otra”.

Celebró que, “en los últimos cuatro días, México ha estado capturando a la gente y devolviéndola a sus países”, algo que atribuyó a su amenaza de cerrar la frontera.

«El otro problema que tenemos son las drogas. Muchas de las drogas que entran a nuestro país entran por la frontera sur», apunto Trump quien señaló que están haciendo muchas cosas.

El republicano había mantenido un discurso sobre la frontera enfocado a los inmigrantes indocumentados, aunque había mencionado también como problemática el flujo de drogas.

«Ya estamos construyendo el muro», aseguró. «Necesitamos ayuda de México. Si México no quiere ayudar, está bien. Vamos a imponer tarifas a sus coches que entran a los Estados Unidos», reiteró.

Cabe señalar, que no se trata de la construcción del muro prometido en su campaña política sino de la construcción de una barrera cerca de San Diego, California, proyecto que supervisará personalmente este viernes.

De cumplirse la advertencia del presidente Trump, no sería la primera vez que impusiera aranceles a productos mexicanos, como ya lo hizo con el acero y el aluminio en 2018, una medida que complicó la negociación del Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (USMCA o T-MEC).

Tampoco es la primera vez que el republicano amaga con imponer un impuesto especial a los autos mexicanos, ya que desde 2017 ha criticado que empresas estadounidenses inviertan en aquel país, en lugar de aumentar inversiones en EEUU.

La nueva postura del presidente Trump, de retrasar el cierre de la frontera, se da luego de que miembros de su propio partido, como el líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell advirtieran de las consecuencias de cerrar la frontera con México.

“Cerrar la frontera tendría un impacto económico potencialmente catastrófico en nuestro país, y espero que no lo hagamos”, advirtió el senador.